Según ha informado este miércoles la Dirección de la Guardia Civil en Baleares, los hechos tuvieron lugar el pasado fin de semana cuando una patrulla de motoristas de tráfico de Palma, que se encontraba efectuando un control de movilidad, procedió a parar un vehículo que era conducido por una mujer.
De acuerdo con la Guardia Civil, al informar de los motivos de su desplazamiento, la usuaria despertó dudas en los agentes, a la vez que notaron un fuerte olor a marihuana, por lo que seguidamente en una inspección visual del vehículo, pudieron comprobar cómo la mujer llevaba unos 30 cogollos de marihuana.
Ante esto la Guardia Civil procedió a efectuar la prueba de drogas, dando resultado positivo a la misma, por lo que fue denunciada por conducir bajo efectos de sustancias estupefacientes.
Igualmente se levantó un acta de denuncias por posesión de droga, incumplimiento de las órdenes declaradas en el decreto de estado de alarma, así como por conducir con el permiso de conducción caducado y además tener la ITV del vehículo caducada desde hace un año y medio.