A 706 personas, 325 usuarios y 381 trabajadores, de las 8 residencias geriátricas de Menorca se les ha realizado la prueba del Covid-19 durante estos días dentro de la campaña de cribado que ha llevado a cabo el Servicio de Salud de Baleares y que finaliza mañana. En total, en las islas se ha practicado la prueba a 8.473 personas, hasta este viernes, entre usuarios y trabajadores. De la población total de las residencias de personas mayores de Baleares registrada al inicio de la pandemia ha muerto un 1,8% y un 7,2% ha sido afectada por el COVID-19.
El programa de cribado de las residencias de gente mayor ha sido una de las prioridades de la Consejería de Salud y Consumo, por el hecho de tratarse de una población vulnerable y de riesgo. Desde Salud destacan que el principal foco de contagio se ha concentrado en 7 de las 56 residencias de las Islas: cinco en Mallorca, una en Menorca, la de Es Mercadal, y una en Eivissa).
El programa de cribado se ha hecho de forma gradual y priorizando los centros donde se ha registrado algún positivo y los que disponen de más plazas. En Menorca se ha actuado en la Residencia Geriátrica de Es Mercadal, el geriátrico Es Ramal, de Alaior, la Residència de Gent Gran del Consell insular, el Geriátrico de Ferreries, la Residencia Geriátrica Asistida de Maó, la de Sant Lluís, la municipal de Ciutadella y Santa Rita.
En cuanto a las residencias de personas discapacitadas, el Servicio de Salud se encuentra en pleno proceso de cribado partiendo de unos criterios de ordenación según el riesgo de contagio de la COVID-19. En este sentido, se tiene en cuenta el número de plazas y también la ubicación, con lo que se priorizan los centros más grandes y los que se ubican a los cascos urbanos.
