Esta semana han comenzado a utilizarse en el puerto de Maó cámaras termográficas portátiles que permiten la obtención de imágenes de las radiaciones de calor y ondas infrarrojas que emiten los cuerpos. Sustituyen a las pistolas de temperatura o termómetros digitales que se estaban utilizando hasta ahora para saber si los viajeros que llegan a la isla tienen fiebre y, de esta manera, controlar la entrada a Menorca de posibles afectados por Covid-19.
La Autoridad Portuaria de Baleares (APB) ha adquirido un total de 20 cámaras termográficas portátiles y una cámara de captura de temperatura para grandes colectivos que se han distribuido entre los controles sanitarios de los pasajeros que el Govern balear está realizando en los puertos de interés general del archipiélago balear en colaboración con Cruz Roja.
La cámara de captura de temperatura para grandes colectivos se instalará en el puerto de Eivissa, el puerto con un mayor número de pasajeros de línea regular de los que gestiona la APB.
