La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha anunciado este sábado que las Baleares acogerán la próxima mesa extraordinaria nacional de Diálogo Social, conformada por el Gobierno de España, CEOE y los sindicatos CCOO y UGT, prevista entre finales de agosto y principios de septiembre, en la que se debatirá cómo seguir ajustando los Expedientes de Regulación Temporal del Empleo (ERTE) a la actual situación económica y laboral, con una incidencia en el sector turístico y con un foco especial a la especificidad de Baleares, donde destaca el peso de los trabajadores fijos discontinuos.
La ministra ha hecho este anuncio después de haberse reunido en el Consolat de Mar en una Mesa de Diálogo Social presidida por Francina Armengol, y en la que han participado la presidenta de la CAEB, Carmen Planas; el presidente de la PIMEB, Jordi Mora; el secretario general de CCOO, José Luis García, y el miembro ejecutivo de UGT, Antonio Copete.
La reunión extraordinaria de la Mesa de Diálogo Social es fundamental para el Govern, puesto que pondrá el foco en las singularidades del mercado laboral de las Illes Balears.
En este sentido, Armengol ha valorado positivamente el esfuerzo demostrado por el Gobierno del Estado, y en particular por el Ministerio de Trabajo, en el despliegue del escudo social que está representando la implantación generalizada de los ERTE, así como muy especialmente la adaptación de la normativa a la especificidad de los trabajadores fijos discontinuos. “La protección tiene que seguir siendo alta, tenemos una situación económica muy compleja en las Illes Balears. Nuestra situación económica es la que más sufre por ser una comunidad autónoma con un modelo muy ligado al turismo”, ha apuntado.
Armengol también ha trasladado a la Ministra, así como trasladó ayer al presidente Pedro Sánchez en el marco de la Conferencia de Presidentes Autonómicos, la necesidad de establecer medidas de flexibilidad con los ERTE, de tal manera que las empresas puedan facilitar la entrada y salida de los trabajadores y que todo el mundo disfrute del mismo nivel de protección, así como “garantizar la protección de nuestros trabajadores hasta la próxima temporada”.
En este contexto, los agentes económicos y sociales también han trasladado a la ministra las principales preocupaciones de las islas, especialmente vulnerables por la debilidad del contexto europeo y las incertidumbres existentes por las decisiones de varios gobiernos europeos, que tanto afectan nuestra oferta turística. Una situación que ya viene siendo compleja y que hay que seguir adoptando medidas de protección social, a fin de que los trabajadores y trabajadoras puedan mantener unas rentas económicas suficientes en estos momentos de tan baja actividad económica.