la boya del puerto de Maó ya ha registrado olas por encima de los siete metros de altura. Se trata de un dispositivo que se encuentra más allá de la bocana de Maó y en mar abierto. Obviamente, las olas que llegan hasta la rada mahonesa son mucho menores. Esto permite que el tráfico de navíos en el puerto se mantenga por ahora. Maó incluso está recibiendo los enlaces con Mallorca que no pueden operar con Ciutadella. Se prevé que el viento amaine esta próxima madrugada lo que debería permitir la entrada y salida de ferrys con normalidad. Al menos Trasmediterránea mantenía su enlace entre Barcelona y Maó que debe viajar durante esta noche.