Otro dato que se desprende del informe es la caída de la facturación en septiembre, estimada en un 62 por ciento respecto al mismo mes del 2019. En agosto, la revisión anual en términos comparativos arrojaba un descenso del 55 por ciento. Con estos datos en la mano, la entidad patronal destaca que, proporcionalmente, han empeorado más las ventas en septiembre que en agosto.
En general, la tendencia detectada por Pimem-Restauració perfila una disminución de la confianza del sector en las perspectivas de ventas. El sondeo también refleja que aumenta en tres puntos la intención de los empresarios de cerrar o hibernar los negocios, situándose en el 45 por ciento del global de la oferta. Además, la opción del cierre por temporada registra un incremento de siete puntos y pasa del 24 al 31 por ciento, mientras que la alternativa de liquidación de la empresa sube dos puntos (del 6 al 8,3 por ciento, concretamente).
CIERRE DE NEGOCIOS
El estudio remarca también que un 31 por ciento de establecimientos del sector cerrarán esta próxima temporada, con un incremento de siete puntos sobre la anterior estimación del 24 por ciento. Paralelamente, el 14 por ciento de encuestados opta por el cierre de su negocio frente al 18 por ciento de la estadística precedente. Estos empresarios alegan su intención de abrir un proceso de liquidación (8.3 por ciento frente al 6 por ciento anterior); otro tres por ciento han decidido entrar un concurso, y el 3 por ciento explica que la finalidad es entrar en fase de preparación de un preconcurso. De este último grupo, una parte de empresarios se han decantado por la liquidación o cierre de temporada.
El estudio elaborado por Pimem-Restauració se hace eco de otros datos de interés acerca de la situación del sector. Así, por ejemplo, el 55 del colectivo declara su intención de mantenerse operativo: esta cifra baja tres puntos en relación al dato anterior. Además, muestra una menor confianza en la posibilidad de mantener el nivel de ventas.
Por otra parte, un 37 por ciento prevé que el negocio permanezca activo pero bajo mínimos, igualando el dato del mes anterior. A su vez, el 8,3 por ciento cree que podrá abrir a medio gas, frente al 11 por ciento precedente. Y, finalmente, el 9,7 por ciento estima que podrá continuar con la actividad del establecimiento con normalidad, con un ligero repunte en relación a la estadística del pasado mes, cuando el dato reflejó un 9 por ciento.
CONCLUSIONES
A nivel de conclusiones, Pimem-Restauració destaca que se confirma la tendencia de contracción del sector, tanto en capacidad ofertada (del 50 por ciento, aproximadamente) como en ventas reales, ya que un 55 por ciento de negocios ha disminuido sus ventas en un 70 por ciento o más, según la comparativa con el mes de septiembre de 2019. Con vistas al futuro, el informe refleja que se anticipa esa tendencia a la contracción, con el 45 por ciento del sector en hibernación o en proceso de cierre.
Para la organización empresarial, habrá que estar atentos a “cómo se materializan los corredores seguros” negociados por Baleares y Canarias con los principales mercados emisores europeos, y hasta qué punto pueden suponer un principio de recuperación del sector, frenando la actual tendencia a la contracción.
Igualmente, Pimem Restauració ha puesto de manifiesto que la actual evolución de las cifras “debe poner en alerta al resto del sistema económico, ya que es un termómetro de nuestra economía a nivel nacional”. Para la patronal, el caso de Baleares “es especialmente significativo”, ya que, según las cifras divulgadas por la organización, el archipiélago acoge el mayor número de bares y restaurantes de España: un establecimiento por cada 91 habitantes, cuando la media nacional está establecida en 170 residentes.