La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares juzgará desde el lunes a un hombre de 32 años acusado de violar a la hija de su pareja, de 14 años de edad en el momento de los hechos, en Ciutadella. La Fiscalía pide para él una condena de 13 años y medio de prisión.
El juicio tendrá lugar en Palma y está previsto que dure tres días. La Fiscalía sitúa los hechos en una mañana de agosto de 2018, cuando el acusado volvía de trabajar a la casa en la que convivía con la que era entonces su pareja.
El fiscal acusa al hombre de haber aprovechado que en ese momento sólo se encontraban él y la menor en la casa para cometer la agresión sexual. Según la acusación, el hombre despertó a la menor acariciándole el cabello mientras le decía “que era muy guapa y que había ido a verla”.
En un primer momento el acusado se habría marchado cuando la menor le preguntó que qué hacía, pero, siguiendo con la versión del fiscal, después volvió y se tumbó en la otra cama del cuarto diciéndole a la niña que se tumbase junto a él.
Presuntamente, él la cogió por el brazo y la obligó a tumbarse con él, diciéndole “que estaban solos en la casa y que no le haría ningún daño”, y procedió a desnudarla y violarla mientras ella protestaba y él le decía que no llorase.
Después, el fiscal sostiene que el acusado dijo a la menor que no lo contase a nadie “porque se le había ido la pinza” y volvió a su lugar de trabajo. La menor fue a buscar a su madre -que trabajaba en el mismo establecimiento que el acusado- y le contó lo ocurrido. La madre llevó a la menor al centro de salud y la derivaron al hospital.
Además de la pena de cárcel, la Fiscalía pide una orden de alejamiento en favor de la víctima durante cinco años, que se inhabilite al acusado para cualquier actividad que conlleve contacto con menores, una medida de libertad vigilada por la que tendría que asistir a un programa formativo de educación sexual y una indemnización de 20.000 euros.
