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Se prevé un otoño caliente en cuanto a negociación salarial

Las posturas de patronales y sindicatos están muy alejadas

Manifestación de carácter laboral
Manifestación de carácter laboral
Foto: Pixabay

A día de hoy se puede hablar de certezas. Datos empíricos que avalan unos buenos resultados en las cuentas de las empresas turísticas de Menorca. Al menos en la mayoría. Pero también son ciertas las cifras económicas que están torciendo el camino hacia el invierno: altos precios de la energía, inflación al alza, precios de las hipotecas al alza. El poder adquisitivo se está perdiendo y eso nos hace más pobres a todos.

Las empresas quieren ser prudentes y no están dispuestas a que sus beneficios se queden en nada tras dos años de pandemia donde ha sido difícil levantar cabeza. Los trabajadores por su parte, que también han participado de los sacrificios de estos dos últimos años, piden ahora que los beneficios de la recuperación sean repercutidos en sus sueldos para compensar un aumento del coste de la vida pronunciado.

Y en ese camino se esperan duras negociaciones que van a llevar presiones por ambos lados. Los sindicatos en Menorca ya hablan de que si no se acercan las posturas se podría prever una huelga, incluso de carácter general.

Los empresarios recuerdan que venimos de una reciente subida del salario mínimo interprofesional y que sus cuentas de resultados están a merced de lo que ocurre en el ámbito económico del país con una previsión nada halagüeña para los próximos meses.
Desde el Gobierno, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social Yolanda Díaz ha defendido la necesidad de subir los salarios, una medida que también ha sido propugnada en la reunión del G20 por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Se cree necesario subir el salario mínimo y actuar frente a la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, no solo en España, debido al panorama de inflación elevada. El factor de la formación también se ha expuesto a la hora de valorar el futuro del mundo laboral. Fortalecer la inversión pública en la formación de los trabajadores se considera un instrumento clave para que las transiciones ecológica y digital sean justas e inclusivas y que proporcione un trabajo más digno.


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