Diez personas detenidas de las que cuatro se encuentran en prisión provisional tras pasar ante el juez. La intervención de cerca de un kilo de heroína, más de 20 gramos de cocaína, diferente medicación y metadona, cinco balanzas de precisión, efectos destinados a la plantación de marihuana, cerca de 33.000 euros en efectivo, diferentes armas prohibidas como machetes de gran tamaño, una ballesta, navajas automáticas, tres puños americanos, 10 dagas y un nunchaku, así como arpones, un bate de beisbol y 20 teléfonos móviles con sus respectivas tarjetas SIM. Este es el balance de la llamada Operación Grillo que tuvo lugar el pasado viernes en Menorca en una de las mayores redadas contra el narcotráfico en la Isla de los últimos años. A esta operación hay que añadirle dos detenciones más ocurridas unas semans antes que permitieron la macrorredada del viernes pasado. En total, el número de detenidos asciende a 12 personas, todas de nacionalidad española, de entre 41 y 56 años de edad, como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal. La desarticulación de esta red se empezó a fraguar el mes de septiembre pasado cuando agentes de Policía Nacional del Grupo de Estupefacientes de la Brigada de Policía Judicial en Maó, junto con componentes del Área de Investigación de Policía Judicial de la Guardia Civil en Maó, comenzaron una investigación conjunta dentro de una operación.
La Operación Grillo se ha desarrollado en tres fases. La primera fue en febrero de este año, cuando ambos cuerpos policiales detectaron a un varón de 39 años de edad que pretendía introducir en Menorca dos paquetes con un total de 38 gramos de heroína y 20 de cocaína, los cuales llevaba alojados en el interior de su organismo. Tras ser detenido pasó a disposición judicial que decretó el ingreso en prisión.
En una segunda fase, ésta desarrollada a comienzos del mes de marzo, se interceptó nuevamente a un varón de 48 años de edad, el cual también llevaba alojados en el interior de su organismo 52,5 gramos de heroína. Se procedió a su detención y posterior traslado a la autoridad judicial que también decretó su ingreso en prisión.
Ésta operación tuvo su punto culminante con una tercera fase el pasado 24 de marzo, con la detención de 10 personas (6 hombres y 4 mujeres) y en la que se llevaron a cabo un total de 7 registros domiciliarios en Maó, Es Castell y Ferreries.
Para esta última fase se dispuso un operativo policial coordinado entre los grupos de policía judicial de ambos cuerpos y auxiliados por la unidades de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, U.P.R., y de la Guardia Civil, U.S.E.C.I.C., así como los guías caninos.
Durante los registros se encontró una caja fuerte, que tras su apertura en sede judicial se comprobó que alojaba en el interior un paquete y medio de heroína con un peso total de 835 gramos, así como una balanza de precisión y bolsas para su distribución entre los puntos de venta que el entramado criminal utilizaba y han quedado desmantelados.
Los detenidos pasaron a disposición judicial, decretándose el ingreso en prisión provisional para 4 de ellos.
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