Decenas de personas, familias enteras, han salido a correr esta pasada noche con la vista puesta en la luna. La tercera edición de la Cursa de la Lluna Plena ha sido una buena ocasión para disfrutar en grupo sin ánimo competitivo, sino de hermandad. Y también cultural, ya que durante el recorrido se ha pasado por diversos monumentos talayóticos.
Fotos: MITO BOSCH / LOLA MAIQUES