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Baleares mantiene una tasa baja de enfermedades respiratorias con 260 casos por cada 100.000

Por ahora no se han adoptado medidas extraordinarias como el uso obligatorio de mascarillas en los centros sanitarios

Dalt Sant Joan.
Dalt Sant Joan.
Por ahora no será obligatorio acceder a los recintos sanitarios con mascarilla.

Palma, 8 ene (EFE).- Baleares presenta una situación epidemiológica por enfermedades respiratorias de 260 casos por 100.000 habitantes, que “hoy por hoy es la más baja de las comunidades autónomas”, ha informado la consellera de Salud, Manuela García.

La tasa de gripe es de 60 casos por 100.000 habitantes, que García ha calificado como “muy baja” y ante la cual la Conselleria ha adoptado ya “las medidas aconsejadas, que es la protección de los más vulnerables”, ha explicado tras la reunión este lunes de un pleno extraordinario del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, en el que ha participado de forma telemática.

García ha explicado que las comunidades autónomas han coincidido en la imposibilidad de tomar una decisión sobre la propuesta de medidas que ha presentado el Ministerio de Sanidad, porque lo han conocido este mismo lunes, por lo que disponen de 48 horas para estudiarlo y previsiblemente se convocará otra reunión, según declaraciones facilitadas por la Conselleria.

Ha criticado que “no ha dado tiempo a leerlo” y ha subrayado que “la toma de decisiones debe estar basada en la evidencia”.

A falta de analizar en detalle la propuesta, la consellera balear ha explicado que contempla “medidas que ya se están dando” como las recomendaciones de aireación, salvo por lo que se refiere a la posibilidad de establecer la obligatoriedad o no de uso de mascarillas en hospitales y centros de salud.

Ha dicho que ha habido unanimidad en recomendar el uso de la mascarilla salvo por parte de las comunidades que ya han implantado la obligatoriedad “por su situación de epidemia y hospitales”.

“En el momento actual, en Baleares, estamos exactamente igual que el año pasado, con el mismo número, y estamos tomando medidas muy similares”, ha insistido, si bien dependerá de la evolución de la incidencia y la situación en hospitales y centros de salud.

La consellera de Salud considera que “no habría que tener necesidad de obligar a esto”. “Cualquier persona con un proceso respiratorio, deberíamos haberlo aprendido de la covid, debería ir con una mascarilla en el bolsillo para no contagiar a quienes están a nuestro alrededor, también en casa”, ha afirmado. “Es un elemento que la educación individual de los ciudadanos es muy importante”, ha subrayado.

Ha insistido en que “no se tomará ninguna medida que no venga avalada por informes técnicos”.

En cuanto a la propuesta de autobaja responsable por parte de los enfermos, una de las cuestiones que se ha llevado a la interterritorial, según García la mayoría de las comunidades ha optado por que haya una visita médica. Ha defendido que “una baja laboral es una responsabilidad, es un acto médico”.

Ha recordado que, en Baleares, en el momento actual a través de Info-Salud, cuando hay una estrecha relación con el médico de familia existe la posibilidad de hacerlo por vía telemática y telefónica, para “desburocratizar las consultas de Primaria”, pero ha insistido en que “siempre será un acto médico” aunque no siempre hace falta que sea presencial.

García ha recalcado el mensaje de tranquilidad sobre la situación en las islas, que ha dicho que es la “esperable”, y ha destacado que las islas se han anticipado en medidas que ha comentado el Ministerio de Sanidad de cara al reinicio del curso “elaborando un documento que ha salido antes del inicio de clases para evitar una propagación de virus”.

Ha recordado la recomendación de Salud Pública remitida a los centros escolares “solicitando que haya una responsabilidad por parte de los padres y que los niños constipados o con síntomas respiratorios no acudan a clase”.

En la Interterritorial, Baleares ha solicitado al Ministerio de Sanidad una campaña de educación sanitaria sobre las infecciones respiratorias, “para recordar lo aprendido con la covid”; otra “muy buena campaña sobre la necesidad de vacunación”; y también una respuesta al déficit de profesionales sanitarios existente.

La consellera ha señalado el rechazo unánime de las comunidades a que el ministerio hable de “colapso” y ha afirmado que, “en el momento actual, no hay un colapso, hay una situación que es esperable cada año durante los meses de diciembre y enero, con un aumento de la circulación de los virus respiratorios y para el que los hospitales tienen un plan de contención que se va imponiendo a medida que la situación empeora o que es necesario”.

García ha destacado que las urgencias hospitalarias han ido disminuyendo progresivamente desde el 2 de enero y que “hay una situación de estabilización”. En cuanto a los centros de salud, hay un aumento de la atención urgente pero, según la información de la Gerencia de Atención Primaria, “la situación está controlada”.

Ha repetido que “es algo esperable, en estas fechas siempre ha sucedido esta misma situación” y ha advertido de que “muchas de estas enfermedades se pasan en casa y tampoco se necesita asistencia sanitaria”, por lo que ha llamado a acudir a los hospitales sólo “cuando realmente sea necesario”.

En Baleares se ha vacunado alrededor del 40 % de los mayores de 60 años y casi un 80 % de pacientes crónicos y complejos, pero llama la atención “una importante falta de vacunación en los niños”

Ha insistido en la necesidad de vacunar a los más pequeños, que constituyen “un foco muy importante de transmisión de la enfermedad” y ha destacado la nueva vacuna para menores de 2 a 16 años, nasal, de la que ha dicho que es “fantástica”. “Es la que hubiéramos querido tener en el período de la covid”.

Ha recordado que en Baleares, desde este miércoles, no hay que pedir cita previa para vacunarse contra la gripe y la covid-19 para que resulte “más cómodo” y ha anunciado que, para la campaña del año que viene, que estará preparada este marzo, se estudian mejoras en la difusión previa y que pueda ser sin cita desde un principio.

“Hemos aprendido que probablemente para una vacunación posterior, porque hay un cierto hartazgo vacunal, probablemente la actitud tenga que ser mucho más proactiva”, ha resumido.


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