El coronel Víctor Manuel Herrero Álvarez ofreció una explicación a los asistentes ayer de una de las charlas que se irán ofrenciendo en diferentes municipios. Para muchos menorquines, todas esas zonas militares siguen siendo terreno prohibido pero, nada más lejos de la realidad. El Consorcio Militar quiere fomentar que las visitas permitan un doble objetivo; que se conozca mejor este patrimonio por parte de la población y que a la postre ayude a restituir y mantener mejor el conjunto patrimonial. En los últimos años ya se han dado pasos importantes para conseguir este objetivo, como en el caso de la Fortaleza de La Mola. Pero hay aún otros elementos que deben recibir la atención del público como las ruinas del Castillo de San Felipe.
El objetivo principal es cambiar la percepción sobre el patrimonio militar, presentándolo como un recurso visitable y enriquecedor para locales y visitantes por igual.
El patrimonio militar de Menorca, en gran parte bajo la tutela del Ministerio de Defensa, alberga elementos arquitectónicos significativos en el Puerto de Mahón. Ante la preocupación de que este rico legado pudiera deteriorarse al quedar sin uso por parte del Ejército, se formó el Consorcio Militar de Menorca. Este consorcio, constituido por diversas entidades, se compromete a liderar proyectos de restauración y conservación del patrimonio militar con el objetivo común de preservar y restaurar las partes que serán cedidas al Consorcio, de las cuales el Ministerio de Defensa es el titular de los terrenos.
Las entidades que forman el Consorcio Militar de Menorca son el Ministerio de Defensa, el Gobierno Balear, el Consell Insular de Menorca, el Ayuntamiento de Mahón y el Ayuntamiento de Es Castell.
El 22 de junio de 1998, se firmó el Convenio para la constitución del Consorcio del Museo Militar de Menorca y Patrimonio Histórico Militar del Puerto de Mahón y Cala San Esteban. La duración del convenio es de cincuenta años, durante los cuales el Ministerio de Defensa cede el uso de los terrenos e instalaciones al Consorcio. Entre las propiedades cedidas se encuentran el Castillo de San Felipe, el Cuartel de Cala Corb, el Museo Militar, la Torre de Felipet, la Torre d’en Penjat, y la Fortaleza de Isabel II.
Estas propiedades, catalogadas como Monumentos de la Arquitectura Militar en el Libro Inventario de Protección del Patrimonio Cultural Europeo, gozan de la consideración de Bienes de Interés Cultural. Este estatus se otorga en virtud de la Ley de Patrimonio Histórico y el Decreto de abril de 1949, resaltando su importancia en la rica historia de Menorca.
Con estas charlas, el Consorcio Militar de Menorca espera despertar el interés y la apreciación por el valioso patrimonio histórico-militar de la isla, invitando a todos a descubrir sus tesoros ocultos y contribuyendo a su preservación para las generaciones futuras.
