Catalina Cirer, consellera de Familias y Asuntos Sociales, ha realizado una visita de inspección a las obras en curso del antiguo cuartel del duque de Crillon en Es Castell, que se está transformando en una residencia para personas mayores dependientes con capacidad para 50 plazas y un centro de día que albergará a 15 usuarios. Iniciadas en julio del pasado año, se espera que las obras concluyan en un período de 18 meses.

El proyecto no solo atiende a una necesidad largamente expresada por la comunidad de Es Castell sino que también supone la recuperación de un inmueble con valor histórico, ubicado junto a la plaza de S’Esplanada, corazón de la localidad. La reforma, que preservará la estructura exterior del edificio mientras adapta el interior a sus nuevas funciones, busca mejorar la calidad de vida de los mayores, permitiéndoles permanecer en su entorno.

Cirer ha enfatizado el compromiso del Govern con el bienestar de las personas mayores, destacando la importancia de estos centros para facilitar su permanencia en la comunidad y fomentar su autonomía. La proximidad de la residencia y el centro a los hogares habituales de los futuros usuarios permitirá mantener y reforzar los lazos con su entorno.

Por su parte, el alcalde de Es Castell, Lluís Camps, ha expresado su satisfacción por el progreso de la obra, anticipando el momento en que los residentes del municipio, actualmente alojados en diferentes centros de Menorca, puedan regresar a su localidad natal. Este retorno les permitirá vivir cerca de su familia, amigos y seres queridos, reforzando su sentido de pertenencia y comunidad.

La visita contó también con la presencia de Alejandro Mora, gerente del Consorcio de Recursos Sociosanitarios y Asistenciales, y miembros del equipo municipal, quienes acompañaron a la consellera Cirer y al alcalde Pons.