Maó, 15 oct (EFE)-. La consellera de Salut, Manuela García, ha anunciado este martes en el Parlament balear la apertura de un expediente sancionador contra el Ajuntament de Maó y la empresa Hidrobal por “haber expuesto, de forma consciente, a la población a beber agua no apta para el consumo humano”.
A preguntas del diputado no adscrito Francisco Cardona, la consellera ha anunciado que se investigará “el grado de responsabilidad” de cada una de las partes “en todo este despropósito”.
García ha acusado al gobierno municipal y a la empresa de haber ocultado la información sobre el mal funcionamiento de la planta desnitrificadora y el estado del agua tanto a la población como a la propia Conselleria de Salut, “saltándose así de forma corresponsable la legislación vigente”.
La consellera ha confirmado que Salut ha ordenado la suspensión de la actividad en la planta desnitrificadora de Malbúger y ha comunicado a los vecinos que el agua sigue sin ser apta.
La respuesta de la consellera ha agradado a Cardona, concejal a su vez en el Ayuntamiento, que ha tildado de “escandaloso” que el alcalde Héctor Pons “no haya hecho absolutamente nada” y haya “despreciado” de esta forma a la ciudadanía.
“Ha permitido que mujeres embarazadas, ancianos y niños hayan consumido agua no apta”, ha reprochado Cardona en el turno de control al Govern durante el pleno . “Maó no es Burkina Faso ni Mali, pero es inaceptable que llevemos meses consumiendo agua con una cantidad de heces superior a la recomendado por la OMS”, ha insistido.
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