Durante el pleno extraordinario celebrado hoy en Maó, se ha aprobado por unanimidad la creación de una comisión especial de investigación sobre la gestión del agua en el municipio. La propuesta, presentada por el PP, tiene como objetivo analizar a fondo la situación del suministro y buscar soluciones a la crisis. El alcalde, Héctor Pons, ha apoyado la medida, expresando su deseo de que la comisión trabaje “con lealtad y colaboración” para abordar el problema.
La sesión ha contado con un turno de preguntas en el que los grupos de la oposición han podido realizar tres preguntas cada uno. Xisco Cardona, concejal no adscrito, ha solicitado una auditoría informática independiente para revisar las comunicaciones relacionadas con la calidad del agua, también preguntó si el alcalde informará de manera continua a las autoridades sanitarias sobre el suministro, y finalmente, exigió la dimisión de Pons.
En respuesta, el alcalde afirmó que no tiene inconveniente en realizar la auditoría, pero que antes consultará con la secretaría del Ajuntament para conocer el procedimiento adecuado. Sobre la información a Sanidad, Pons señaló que es Hidrobal quien tiene la obligación de informar, aunque admitió que durante algunos meses no lo hizo correctamente, motivo por el cual se abrió un expediente sancionador. Sobre la petición de dimisión, el alcalde reafirmó su compromiso de seguir al frente para resolver la crisis.
Por su parte, el portavoz de Ara Maó, Jordi Tutzó, recordó que su grupo ya había solicitado en septiembre una auditoría informática para revisar las gestiones relacionadas con la crisis del agua. Luego, pidió explicaciones sobre los retrasos en las mejoras de la planta desnitrificadora de Malbuger y la puesta en marcha de la de Sant Climent. Héctor Pons explicó que la planta de Malbuger está en proceso de recibir propuestas de mejora por parte de la empresa constructora, mientras que en Sant Climent, aunque ya se ha reemplazado una pieza defectuosa, han surgido nuevos problemas técnicos que están siendo evaluados.
El concejal del PP, Marcos Pax Bosch, planteó la posibilidad de ajustar las tarifas del agua o aplicar bonificaciones a los usuarios afectados por la falta de agua potable. El alcalde indicó que ya se ha estudiado esa opción y que, aunque los técnicos lo ven viable, existen complicaciones jurídicas que han retrasado su aplicación.
Finalmente, Pax también preguntó si el equipo de gobierno tiene previsto iniciar los trámites para la construcción de una desaladora como solución a largo plazo. Pons explicó que, junto a otros ayuntamientos de la isla, ya han solicitado un estudio de viabilidad al Govern balear para la construcción de una desaladora en la zona de Llevant, destacando que su principal objetivo es garantizar el suministro de agua y reducir la extracción de los acuíferos.
El alcalde subrayó que la condición que puso fue que este proyecto no se utilice para fomentar el crecimiento turístico o urbanístico.
Si em d’esperar sol-lucions definitives des anteriors i actuals polítics , podem esperar com a mínim 10 o 15 anys. Com a mostra sa carretera M-1.