Martí March (Pollença, 1954) es el máximo responsable de la Educación balear. Según reza su currículo es licenciado y doctor en Ciencias de la Educación por la Universidad de Barcelona y catedrático de Sociología de la Educación y Pedagogía Social de la Universidad de las Illes Balears. Ha ocupado numerosos cargos en la UIB y ha sido miembro del Consejo Escolar de las Illes Balears, director del Anuari de l’Educació de les Illes Balears, y es coordinador del grupo de Investigación y Formación Educativa y Social (GIFES) de la UIB. Ejerce la vicepresidencia de la Sociedad Iberoamericana de Pedagogía Social.
March como conseller de Educación se encuentra al frente de una de las áreas de Govern más controvertidas y sometidas a un mayor desgaste político. Ha concedido una entrevista a los lectores de mallorcadiario.com en la que habla de temas tan controvertidos como el abandono escolar, las infraestructuras o el adoctrinamiento.
En la anterior legislatura tuvo usted tres predecesores, no fueron años fáciles para Educación.
Y muchos directores generales, de momento aguantamos todos.
Le ha tocado una de las consellerías difíciles, siempre en el punto de mira y generando titulares, no siempre favorables. ¿Cómo lo lleva?
Muy bien, es un trabajo apasionante. Y creo que está mejorando la realidad educativa de las Balears. Lo digo sin triunfalismos, somos conscientes de que aún queda mucho por hacer. La Educación tiene un problema histórico, pero estoy seguro de que estamos poniendo las bases y dando pasos claros y evidentes para mejorar. Lo he dicho mil veces: en la Educación no hay milagros, no hay fórmulas mágicas. Hemos iniciado un camino de continuidad y de estabilidad. Sin la continuidad la Educación no funcionará nunca.
PACTO EDUCATIVO, FINANCIACIÓN Y PRESUPUESTOS
Ya que habla de continuidad. Todo el mundo está de acuerdo en que, como dice, no hay milagros y en que todos debemos llegar a consensos y remar en la misma dirección. La realidad no es así. ¿Qué les pasa a los políticos que son incapaces de llegar a pactos educativos que trasciendan las legislaturas?
Deberíamos remontarnos a lo que creo son los dos grandes pactos educativos en España. Uno es la Constitución de 1978 que recoge en el artículo 27 el gran pacto histórico de la Educación en España. El otro es la transferencia de competencias en el año 1998. Son los dos elementos clave del sistema educativo actual. ¿Por qué no se ha llegado a un pacto de desarrollo de estos dos principios? A nadie se le escapa que la educación tiene un planteamiento ideológico y político importante. A lo largo de al Historia se ha demostrado que ha habido confrontación. Debemos poner sobre la mesa aquellos puntos que consideramos básicos para llegar a un acuerdo de mínimos. Después cada gobierno los aplicará. Los mínimos son eso, mínimos. Cada uno gestionará a su manera, pero manteniendo el consenso. De entrada hay que entenderse con la comunidad educativa, sin el apoyo de directores, docentes, asociaciones de padres y madres, sindicatos, patronales… Sin ellos no se puede desarrollar una política educativa, no se puede ir “en contra de”. El ejemplo de la pasada legislatura es una realidad, se pusieron las bases para una confrontación como nunca se había visto ya no diré en Balears, me atrevería a decir que en toda España. No se puede desarrollar la Educación sin el diálogo con la comunidad educativa. El consenso no es fácil por lo que le decía, por las cuestiones políticas e ideológicas. Eso es aplicable a otras situaciones, mire como el Pacto de Toledo por las pensiones ahora ha trastabillado. España vive un momento convulso, con un Gobierno que no toma decisiones. No es un buen entorno para afrontar un pacto educativo. Desde el año 2014 estamos esperando un cambio en el modelo de financiación. Sin el acuerdo en financiación será muy difícil llegar a un pacto educativo, pues la financiación es un elemento clave, no el único, en esta cuestión. La coyuntura actual es complicadísima. Aún así, el pacto educativo es posible y necesario.
El presupuesto de la Conselleria de Educación es de 935 millones de euros. Desde el entorno educativo se habla de la cifra de 1.000 millones. ¿Está usted de acuerdo con la necesidad de alcanzar esa cantidad? ¿Se solventarían los problemas con más dinero?
Desde que comenzamos a gobernar hemos incrementado el presupuesto en más de 150 millones de euros, casi un seis por ciento anual. ¿Es suficiente? Debemos seguir creciendo, pero tenemos una norma de gastos del Sr. Montoro que nos lo impide. Pero no se trata tanto de tener más presupuesto como de pactar el sistema de financiación. Si tuviéramos ese dinero deberíamos gastarlo bien, con conciencia, pensando lo que hacemos. Esto no es tener más presupuesto y gastarlo, hay que pensar muy bien lo que se hace con el dinero público. Esperamos llegar o acercarnos a los 1.000 millones en 2019. Es un error pensar que sólo necesitamos dinero. No es así, necesitamos una hoja de ruta clara, saber hacia dónde vamos. Con recursos, con las ideas claras y diálogo, iremos allá dónde queremos ir, a nuestro objetivo: a que los centros funcionen mejor. Con 1.000 millones tendríamos un presupuesto adecuado para dar respuesta a más demandas y necesidades históricas.
¿Qué tipo de necesidades?
Le pondré algunos ejemplos. Hemos revertido los recortes a los profesores, ahora hay más de 830 profesores nuevos. A final de legislatura habrá más 1.100 profesores. Hemos devuelto los derechos laborales a los docentes. Hemos llegado a acuerdos con la concertada, y eso que nos critican y dicen que somos enemigos de la concertada. En la escuela concertada hemos reprogramado un convenio de 2008 que estaba parado y que supondrá la equipación paulatina de sus sueldos a los de los profesores interinos de la pública. Hemos multiplicado las ayudas de comedor en la pública y la concertada, ayudas en el tramo de 0 a 3 años…
Han planteado un plan de tres años para reducir el número de profesores interinos hasta el 10 por ciento en tres años, ofertando unas mil plazas anuales.
Hay que dar estabilidad a los profesores. Y los centros, como pasa en la empresa, necesitan estabilidad. Cambiando cada año el profesorado es difícil fijar una línea de trabajo. Queremos un clima educativo tranquilo. Comenzamos con una situación conflictiva y ahora todo está tranquilo. Los profesores, como no puede ser de otra manera, siguen con sus reivindicaciones y demandas, pero todo es mucho más tranquilo. Hemos recuperado el debate pedagógico, los claustros hablan con nosotros de como mejorar la Educación y eso es lo importante.
ASESORES
Una de las cuestiones de las que más se ha hablado sobre su gestión es la del número de asesores con los que cuenta la Consellería. Se ha publicado que usted se encontró con aproximadamente un centenar y que esa cifra se ha incrementado. Ciudadanos denuncia decenas de contrataciones. No voy a cuestionar la figura del asesor, que está demonizada.
Puede hacerlo, le contestaré a lo que me pida.
No, no, si lo pensara se lo diría, no lo dude. Lo que quiero saber, para que quede claro, es ¿cuántos asesores trabajan a fecha de hoy en la Consellería de Educación?
En estos momentos 150, son lo que llamamos ATD, asesores técnicos docentes.
¿Son profesores?
Sí, lo son.
Para que nos entendamos, ¿podríamos decir que están como asesores en comisión de servicio?
Sí, más o menos, es una buena forma de decirlo para que se entienda, son profesores que trabajan en la Conselleria.
¿Son los que tienen que ser o son demasiados?
Pues mire, le diré que es el momento en el que menos asesores hay.
Antes también había, no son nuevos.
Antes, desde que se produjo la trasferencia de Educación en 1998, había más. Ahora, con 150, es cuando menos hay.
Se denuncia que los asesores ocupan plazas que corresponderían a personal, por llamarlo de alguna manera, administrativo, lo que supone que esas plazas no salgan a oposición pública.
Ha habido tantos asesores por varios motivos. Desde la trasferencia de Educación no se creado una estructura administrativa para gestionarla. Lo fácil era recurrir a asesores para ocupar puestos de administrativos. Hacienda y Función Pública no daban permiso para crear esas plazas y, como docentes tenemos de muchas especializaciones, se acababa recurriendo a ellos. Hay una segunda explicación, y es que siempre existirán asesores docentes. Lo que estamos trabajando es que las plazas de asesores se reduzcan a un centenar y que las otras 50 pasen a ser cubiertas por personal de la CAIB.
¿Cómo planea conseguirlo?
A partir de ahora todos los docentes entrarán por concurso de méritos y todo los que hay ahora poco a poco se irán cubriendo con plazas de concurso público. Tenemos un acuerdo de estructura administrativa con la Consellería de Hacienda para que, de forma progresiva, se cambien asesores por personal de la CAIB. Así pues, quedaría una estructura de: cargos políticos, (yo mismo, directores generales, Jefe de Inspección, cargos de confianza…); personal de la CAIB; y personal docente. Creemos que entre esta legislatura y la próxima conseguiremos una estructura moderna en un edificio moderno (nota: la nueva sede se inauguró el pasado 26 de febrero), son los pasos para una Consellería del siglo XXI adecuada a la Educación del siglo XXI. Comprendo y asumo las críticas por el número de asesores, pero hay que entender que estamos trabajando para cambiar las cosas.
AULAS MODULARES E INFRAESTRUCTURAS
Antoni Morante, director general de Centros de la Conselleria d’Educació, ha confirmado que el Govern construirá escuelas enteras con aulas modulares, lo que todo el mundo llama barracones.
Y el PP ha dicho “barracascuela”.
Morante lo anunció el 18 de febrero y dijo que, tras visitar centros de dichas características en Barcelona, los técnicos y los políticos consideraban viable la iniciativa de cara a la próxima legislatura. ¿Confirma usted la construcción de escuelas modulares?
Seguimos un plan de infraestructuras que supone la construcción de diez nuevos centros, la ampliación de otros, hacer reformas, eliminar fibrocemento, quitar barreras arquitectónicas… Durante mucho tiempo no había ni plan, ni se hizo lo que se tenía que hacer. El plan actual abarca del 2016 al 2023, ahora tenemos una hoja de ruta. Más que construir nos gustaría reformar y mejorar, pero Balears tiene una gran presión demográfica que nos obliga a edificar nuevos centros. Desde que comenzó la legislatura se han escolarizado 3.000 niños más, eso equivale a cinco escuelas. Entre centros acabados y los que empezamos estamos hablando de siete u ocho al acabar la legislatura, más las reformas. Tenemos que garantizar las plazas escolares, son un derecho constitucional. Le digo que no contemplamos las escuelas modulares en estos momentos. Sólo se construirían en caso de una gran necesidad porque se hacen muy rápido.
¿Sólo de manera urgente y provisional?
Claro, así es. Fuimos a Barcelona para ver alternativas, tenemos que estar informados. Pero no se contempla, no está en el plan de infraestructuras. No hay ningún proyecto de centros modulares, ninguno.
Los datos de los que dispongo sobre instalaciones modulares en Balears son los siguientes: 122,5 aulas modulares en las Islas; 85,5 en Mallorca, 12 en Menorca, 17 en Ibiza y 8 en Formentera. En total, el curso 2017-2018 habrá 16 aulas más que el curso pasado: 15 en Mallorca y 2 en Ibiza, mientras que en Menorca se ha quitado una. ¿Qué cifras manejan de cara al final de la legislatura?
Queremos quitar todas las que podamos. Si no hemos podido retirar más es por la presión demográfica y por la obligación que tenemos de escolarizar. La otra opción es incrementar las ratios de alumnos por aula. Somos conscientes de que si nos plantamos con 28 ó 29 alumnos en una clase tenemos que poner un profesor de apoyo, tiene que haber dos por clase. Nuestro objetivo es contar con más plazas escolares y en condiciones. No está prevista la construcción de ninguna escuela modular, a pesar de que es fácil verlas en otros lugares de Europa. De todas maneras, alguien debería hacerse un viaje por Europa y vería escuelas modulares.
¿Cómo anda de recursos para la construcción y reformas?
El IBISEC (Institut Balear d’Infraestructures i Serveis Educatius) cuenta con un presupuesto de 26 millones de euros. Este presupuesto, no es solo para este año o los venideros. Se deberá mantener en el futuro para mantener las escuelas y que sean centros dignos de la educación del siglo XXI. Hay centros que necesitan “mà de metge”. Cuando voy a las escuelas siempre me enseñan los aseos, y los he visto de todos los colores. Hay que construir y reformar, y cuando se estabilice debemos continuar invirtiendo en el mantenimiento.
ADOCTRINAMIENTO
Quiero pedirle su opinión sobre ciertos casos que algunos consideran adoctrinamiento en las escuelas públicas. Por ejemplo, en el IES Mossèn Alcover de Manacor se permitió un acto de apoyo al referéndum del 1 de octubre de Cataluña, organizado por el Sindicato de Estudiantes de los Països Catalans (SEPC). En las fotografías del acto se puede ver a los profesores aplaudiendo y a los alumnos en el patio. ¿Puede un centro público autorizar y acoger un acto político de un sindicato destinado a menores en el tiempo de recreo?
Le contestaré a su pregunta, si bien antes quiero decir algunas cosas en relación a la campaña de algunos partidos respecto al adoctrinamiento. En la Conselleria, cualquier cosa que se haya publicado en los medios ha tenido como consecuencia que hemos enviado a hacer un informe, y este informe se ha entregado al Jefe de Inspección y nosotros lo hemos enviado a Fiscalía de menores. Se ha actuado de una forma clara. Tenemos un acuerdo con Fiscalía desde al año 2016 para mejorar la coordinación entre ambas partes. De cualquier cosa que pase en un centro (abusos sexuales, maltratos…) automáticamente se informa a Fiscalía. Es importante porque tenemos que garantizar la seguridad de alumnos, directores, docentes…
¿Así se actuó en el caso del IES Mossèn Alcover de Manacor?
Sí, así se hizo. Y le aseguro que el acto del que hablamos no fue organizado por el centro. Fue un acto organizado por una serie de estudiantes que de alguna manera tuvo una contrapartida por parte de otros estudiantes que no estaban de acuerdo. Y le diré más en respuesta a su pregunta, yo no estoy de acuerdo con que se organicen este tipo de actos. Le dijimos al director que este tipo de actos no se podían hacer. Y nos consta que Fiscalía de menores lleva a cabo sus investigaciones al respecto.
Está bien que me lo explique, sabe que una crítica frecuente es que la Consellería, cuando menos, es tibia con los casos de adoctrinamiento.
Mire, en la Consellería nos creemos eso de que “todo el mundo es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad”, es un principio constitucional. Cuando hemos tenido conocimiento de ese tipo de actos a través de los medios de comunicación, siempre hemos actuado. ¿Qué es actuar con tibieza? ¿Que no abrimos expedientes? Los expedientes se abren cuando tienes información evidente y clara para ello, de lo contrario no estás actuando de forma clara. También deberíamos plantearnos qué entendemos por adoctrinamiento, para algunos quiere decir catalán e independencia, como si todo el adoctrinamiento fuera eso. Hay muchos tipos de adoctrinamiento y a mi no me interesa el de ningún tipo. Aquí trabajamos para una educación en valores y que defienda los derechos humanos. No hemos sido tibios, hemos sido rigurosos, hemos recabado la información pertinente y hemos hablado con los directores, y les hemos dicho que ese tipo de actos no se deben hacer. No necesitamos abrir expedientes, no es nuestra política. Se abren expedientes en función de cuestiones concretas y siempre con evidencias. Tenemos 12.000 profesores públicos, más de 4.000 de la concertada, 400 centros y unos 150.000 estudiantes…. Es evidente que siempre pueden pasar cosas que no podemos controlar. Esto no es un Gran Hermano en el que se controla lo que pasa en cada aula. Lo he dicho muchas veces: si cualquier padre, madre, docente, quien sea, tiene alguna duda o cree que se dan casos de adoctrinamiento puede ir a Fiscalía o a Inspección y denunciar lo que considere, A veces se dice que no lo hacen por miedo… ¿Miedo a qué? Si alguien no se fía de la Consellería puede ir a Fiscalía. Aquí cada semana recibimos a padres y a profesores por demandas, protestas, consultas, por lo que sea. Y se les recibe en privado. Le aseguro que los inspectores, que son un cuerpo profesional, no actúan por motivos ideológicos. Si así fuera, si su comportamiento no fuera serio y riguroso, le aseguro que yo mismo les abriría un expediente.
Imagen del acto celebrado en el IES Mossèn Alcover de Manacor
En ocasiones puede ser difícil probar un caso de adoctrinamiento.
Hay que denunciarlo con pruebas, lo digo por Ciudadanos, que me gustaría que si acusan al menos que sean serios. Ciudadanos nos acusa en el Parmament, el Sr. Pericay se va a Madrid a ver al Defensor del Pueblo a decirle que el adoctrinamiento en las Illes Balears era una “cuestión sistémica”. Todavía estamos esperando las pruebas. Las pruebas que aportó eran, con todos mis respetos, una serie de cuestiones que se habían publicado en medios. Con evidencias, actuaremos. Pero quiero reiterar que lo ocurrido en el IES Mossèn Alcover de Manacor fue un acto organizado por estudiantes, no por la dirección y el profesorado del centro.
Al tiempo que se producía este caso, desde Més per Mallorca se pedía al PP que no metiera las manos en “nuestra educación” y David Abril proponía un referéndum de independencia para Mallorca en el año 2030 porque hasta ese momento había tiempo de “construir masa social”. Le quiero preguntar al respecto, no tanto como responsable de Educación sino como político.
Es una pregunta que me encanta.
¿Le preocupa que sus socios del Govern puedan utilizar, o tengan la tentación de hacerlo, las escuelas para construir esa masa social?
Yo no voy a entrar en lo que diga Més sobre esta cuestión, esa es su responsabilidad.
Pero son sus socios.
En esta Consellería estamos personas del PSOE y de Més. Las declaraciones que pueda hacer Més sobre una cuestión tan polémica son eso, sus declaraciones. Creo que ningún partido debe meter las manos en las escuelas, ni partido, ni sindicato, ni ningún grupo de orden sectario o ideológico. Debe quedar claro. Los que piensan que la escuela es una herramienta de adoctrinamiento para crear masa social crítica para que en el 2030 se pueda celebrar ese referéndum,,, Me parece, con todos mis respetos, que es ir muy lejos. La escuela cada vez tiene un nivel de influencia ideológica menguante frente a las redes sociales, los medios de comunicación, las familias… Al final, los niños adquieren sus valores en la familia. Si tanto proceso ideológico hay en las escuelas que alguien me explique cómo es que tras las elecciones una vez gobierna el PP, en otras ocasiones el Pacte. La Educación no puede ser un espacio de adoctrinamiento. Debe ser un espacio de formación de ciudadanos libres, críticos, con competencias para desarrollar ideas y emprender acciones. Yo soy fruto del adoctrinamiento, de la Formación del Espíritu Nacional, del nacionalcatolicismo, en castellano…. Y todo eso no ha tenido efecto. Si alguien cree que el adoctrinamiento tiene efectos, pues a los hechos me remito. Los partidos no pueden meter sus manos en las escuelas, debemos respetar la autonomía pedagógica del centro y esa es la política de esta Consellería. Queremos ciudadanos del siglo XXI, críticos, formados, capaces de entender el mundo, que sean iguales entre hombres y mujeres, que no discriminen por condición de raza o ideología. Convivencia y respeto, esa es la cuestión y el objetivo de la escuela. Sea quien sea el que tenga ideas de adoctrinamiento se equivoca. Lo tenemos claro, en esta Consellería no nos ponemos de perfil.
RESULTADOS ACADÉMICOS
Usted ha dicho que los políticos no deberían “tirarse a la cabeza” el fracaso escolar porque es un problema en el que hay “muchas responsabilidades”.
Cuando era director del Anuari de l’Educació siempre decía que los políticos deben dejar de tirarse el fracaso a la cabeza los unos a los otros y fijarse en los éxitos, que también los tenemos. Las buenas noticias no venden y es normal que siempre se hable más de las cosas negativas. Para analizar el fracaso y el abandono escolar no podemos generalizar. Es un problema transversal, no todos los profesores son iguales, ni los padres, ni los centros… Decir que el fracaso escolar es culpa del PP o del PSOE ni aporta ni soluciona nada.
Los datos de fracaso y abandono escolar en Balears son malos desde hace años. Según datos de enero del Gobierno, el 26,5 por ciento de los alumnos de ESO no consigue finalizar los estudios, casi siete puntos por encima de la media nacional que se sitúa en el 18,2 por ciento.
El abandono escolar se refiere a alumnos que no acaban la ESO y que no continúan con su formación en bachillerato o FP entre 18 y 24 años. El País Vasco está en el 8 por ciento. ¿Por qué nosotros tenemos una tasa más alta? Está relacionado con el fracaso escolar. A mayor fracaso, mayor abandono escolar. Nuestro principal objetivo es mejorar la enseñanza obligatoria, primaria y secundaria, especialmente esta, que es donde se dan más problemas. Las cifras que tenemos nos dicen que vamos mejorando poco a poco. Piense que en 2007 la tasa de abandono escolar era del 40 por ciento. En la medida que mejoremos, bajará el abandono. Por otra parte, debemos fomentar que después de la ESO sigan estudiando, ya en bachillerato o en FP. Estamos fomentando la FP. En lo que va de legislatura, la FP ha ganado mil alumnos, eso es importante. No debemos olvidar el mercado de trabajo de Balears. Es suculento para los jóvenes de 16 ó 17 años que ven que pueden ingresar 800 o 900 euros al mes. El problema es que entran en el mercado laboral sin cualificación. El Sr. Toni Riera de la Fundació Impulsa ha puesto de manifiesto que nuestra competitividad es baja, y la forma de ser más competitivos es con trabajadores más formados.
Esa idea trasciende lo que es Educación…
Es necesario que los agentes sociales, sindicatos, patronales, empresarios, comiencen a lanzar mensajes reales. Tenemos que hacer entender a los jóvenes que con formación y cualificación las cosas les irán mejor. En los convenios sindicales debe quedar reflejado que estar cualificado es necesario para promocionar y conseguir un salario más alto. Y también debemos implicar a las familias. Aunque a veces no se ven los beneficios de forma inmediata, a medio y largo plazo es bueno que sus hijos estudien. Es un esfuerzo conjunto, con la Administración y el Govern, los primeros.