La colaboración entre el Consell de Menorca y la Generalitat de Catalunya para la investigación arqueológica en el fondo marino de Calescoves ha permitido sacar a la superficie una treintena de piezas de origen púnico-lusitano de 2.400 años de antigüedad. Algunas de ellas incluso mantienen las pinturas decorativas que les hicieron al crearlas. El éxito de la excavación submarina ejecutada en el último mes ha sido posible gracias a la participación del buque científico Thetis de la Generalitat. Dispone de todos los utensilios necesarios para estudiar pecios.

Entre las piezas halladas cabe destacar más de una treintena de restos que una vez convenientemente restaurados podrán ser expuestos en el Museu de Menorca. El conjunto de materiales documentados está formado principalmente por ánforas de diferentes cronologías y cabe destacar un gran número de cuencos y platos con restos de pintura así como de materiales cerámicos de la cultura talayótica difícilmente recuperables en un entorno que no sea subacuático.

Los trabajos en extensión a toda la cala permitirán realizar una periodización más cuidadosa de su utilización.

Una vez finalizados los trabajos de campo se iniciarán los trabajos de estudio de materiales que nos permitirán desarrollar un amplio relato científico, cronologías, intensidad de uso, distribuciones espaciales … así como plantear la necesidad de futuras actuaciones.

Una parte de los restos localizados en el fondo submarino de Calescoves son producto de la navegación y los naufragios relacionados con la antigua provincia romana de la Tarraconensis, y comparten historia y problemática de conservación con los restos del litoral catalán.

Esta relación abre la puerta a una nueva etapa de  intercambio de experiencias y conocimientos entre los especialistas de ambas zonas.