La isla de Menorca dispone de buenos puertos de resguardo para navegantes, bien conocido y valorado a lo largo de la historia. En la actualidad, no tanto por una cuestión de seguridad (más bien de ocio) se puede disfrutar de la tranquilidad de calas recónditas de gran belleza natural. La geología particular de la isla, tan diferente en el norte y en el sur, es una ocasión que facilita excursiones que vayan a lo largo de la costa ofreciendo diferentes instantáneas de estos valores naturales.
La zona sur tiene playas de arena más blanca, acantilados con vestigios de lugares donde se escondía quien hacía contrabando antaño, con cuevas al nivel del mar y algunas de las postales más buscadas en el marco natural de Macarella y Macarelleta. En el norte hay un crisol de calas y rincones de gran belleza, con una costa más abrupta, con colores del suelo más antiguo de la isla y rincones que acogen al navegante ofreciendo un marco natural sorprendente.
Antes de salir a navegar debemos plantearnos el tipo de excursión que queremos hacer. Las hay para aquellos que disfrutan llevando el timón del barco capitaneando el viaje. No es imprescindible tener titulación puesto que las empresas que alquilan embarcaciones las tienen de todo tipo, incluyendo aquellas más sencillas. La gama de posibilidades empiezas desde un paddle surf, pasando por un kayak de mar y subiendo en el escalafón de naves con botes, neumáticas, lanchas y hasta los más elaborados yates para los que sí hace falta una titulación. Siempre que el presupuesto lo permita, incluso se alquilan barcos con patrón, que es la mejor garantía de éxito en el desarrollo de la excursión puesto que no solo conocen su trabajo si no que además conocen la lámina de agua por la que navegan.
Si vamos a ser nosotros los que llevemos los mandos, a tener en cuenta siempre los consejos de los expertos con la información meteorológica clara y actualizada. Siendo una isla, la decisión es fácil; si sopla Norte nos vamos al sur o al revés. No obstante conviene conocer las limitaciones propias de la utilización de las embarcaciones; no fondear en zonas prohibidas, evitar fondos arenosos o de praderas de posidonia, respetar la distancia a zonas de baño, respetar la velocidad y normas de prioridad de paso en zonas portuarias.
Si no hemos navegado antes o no queremos tener las preocupaciones propias de tener en cuenta todo lo anterior, hay otras alternativas muy prometedoras. Apuntarnos a excursiones organizadas. Las hay de todo tipo; exclusivamente de una zona de la isla, otras que dan la vuelta entera a Menorca en varios días, para hacer snorkeling, buceo a la búsqueda de pecios o deportes naúticos diversos. Las empresas que ofrecen este tipo de excursiones son de dos tipos; las que tienen un programa concreto a desarrollar o aquellas que aceptan pactar con el cliente el tipo de excursión, duración y recorrido que se quiere hacer.
Las empresas que se dedican a toda esta oferta pueden encontrarse en internet. En algún portal aparecen agrupadas, como en el de la Estación Náutica de Menorca, aunque está página está desactualizada.