El proyecto propone una monitorización automática de especies vulnerables a la pesca aplicando las últimas tecnologías y modelos de inteligencia artificial con el fin de que los ordenadores realicen por sí mismos la identificación y conteo de las espacies de peces.
De este modo, según ha explicado el investigador principal del proyecto, Josep Alós, el proyecto se encamina hacia un monitoreo automático de la fauna marina que, a su vez, permite diseñar planes específicos de gestión o anticipar los efectos del cambio climático.
CÁMARAS SUBACUÁTICAS
Durante el desarrollo del proyecto se colocan una serie de cámaras subacuáticas en zonas protegidas de la Red Natura 2000, una red de áreas protegidas que tienen por objetivo asegurar la supervivencia de la biodiversidad marina, haciéndola compatible con el desarrollo de la actividad humana en la zona costera.
Desde el Imedea han explicado que las cámaras contienen un cebo para atraer a los peces y, de este modo, cuantificar las especies presentes así como su concentración y distribución.
Un sistema clasifica de forma automática las imágenes, una metodología que, según sostiene la post-doc Arancha Lana, supondrá la generación masiva de datos ecológicos y una visión nueva de la dinámica de los peces del Mediterráneo.
PESCA RECREATIVA SOSTENIBLE
Por otro lado, el proyecto AutoNatura2000dos evaluará el estado de las especies objetivo de pesca recreativa como el raor, Xyrichtys novacula y sus especies acompañantes.
Si la primera fase del proyecto monitorizó de forma automática el movimiento de barcos de pesca, en esta segunda fase la monitorización de peces a través de inteligencia artificial pretende crear un sistema que permita un monitoreo automático del estado de las poblaciones de fauna de la Red Natura 2000.
El proyecto AutoNatura2000dos cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica a través del Programa pleamar del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP).