Le está pasando a mucha gente. En su teléfono aparece un mensaje y le recuerda que casi no queda espacio para seguir recibiendo mensajes.
En circunstancias normales, el uso habitual de estos aparatos recomienda que se saneen de tanto en cuanto. El motivo es que recibimos fotos o vídeos que nos parecen divertidos, los guardamos para verlos en otro momento y acumulamos tanta información que saturamos el espacio de memoria del teléfono (que no es infinita).
Pero en estas últimas semanas, a caballo de la actualidad y el encierro, los teléfonos sacan humo. Recibimos mucha más información por redes sociales y mensajería instantánea. Generamos más archivos que a su vez compartimos. Incluso hay material que recibimos por varias vías o usuarios y que guardamos, aunque lo tengamos repetido. Todo eso desemboca en que el teléfono funcione más lento o que deje de funcionar.
Para evitarlo es tan sencillo como liberar espacio. Seleccionar y borrar es la forma más sencilla aunque tiene el inconveniente de que es un proceso lento. La mayoría no queremos borrar una carpeta de información, sobre todo si la tenemos desordenada y no sabemos si hay el riesgo de borrar al mismo tiempo el último “meme” que nos hizo gracia o el video de cuando nuestro hijo sopló las velas de su último cumpleaños. Por lo tanto el primer consejo es que cuando recuperemos espacio en el teléfono, guardemos sólo lo verdaderamente importante y que lo categoricemos en carpetas; una para cosas graciosas, otra para temas familiares, otra para temas extrictamente de trabajo, etc.
Conectar el teléfono con un cable de datos específico a un ordenador y mover la información en una carpeta del disco duro es también una opción.
Varias plataformas permiten la sincronización de material pesado (en datos) como fotos o vídeos con la nube, de manera que el almacenamiento se duplica y queda una copia recuperable fuera de la memoria del teléfono. Eso te permite vaciar el teléfono de tanto en cuanto sin miedo a perder nada. Las misma plataformas te indican cómo puedes hacerlo en tutoriales o pestañas de Ayuda, como por ejemplo en el marco de Google (Drive-Fotos).
Otro consejo a tener en cuenta es detectar y corregir la presencia de aplicaciones que están consumiendo muchos recursos en tu teléfono. A veces lo tenemos cargado de aplicaciones que no utilizamos nunca o que están funcionando en segundo plano y que lastran el buen funcionamiento del dispositivo. Existen algunas aplicaciones que te ayudan a hacer este trabajo (sobre todo el de detección) que son muy útiles para saber qué información es prescindible y que puedes eliminar para que el teléfono funcione mejor (como la de la memoria caché).
Incluso las aplicaciones que ya tienes funcionando puede que dispongan de versiones actualizadas más “ligeras” y que te conviene tener para sustituir las antiguas.