El puerto de Maó ganará 5.000 m2 de espacio para peatones y terrazas en un tramo de la rada mahonesa. Será entre las costas de Corea y deses Voltes cuyo tráfico pasar a ser de sentido único. Así se desprende de la transformación de una parte del vial del puerto que se presentó este lunes por la mañana en la antigua estación marítima. Esta transformación garantiza el acceso para vehículos en todo el puerto y mantiene los accesos por Costa de Corea, Costa de ses Voltes y Costa de Ronda. Las acciones concretas que se llevarán a cabo para la transformación de una parte del vial del puerto empezarán este mismo lunes.
De este modo, se aumentará el espacio para peatones en el tramo situado entre la costa de Corea y la costa de ses Voltes (Rochina), que pasará a ser de sentido único, de levante a ponente. Se mantendrá el doble sentido de circulación entre la costa de Ronda y el aparcamiento de la antigua Estación Marítima, que seguirá funcionando como hasta ahora. El objetivo es ampliar el espacio para la actividad de las personas, para avanzar hacia una relación más directa de los mahoneses con el puerto. En este sentido, con la creación de un puerto más amable para la actividad humana se quiere favorecer, también, la dinamización de la actividad socioeconómica en la rada mahonesa. La modificación de este tramo de la vía permitirá la ampliación de las terrazas de todos los establecimientos situados en la zona indicada.
La Autoridad Portuaria de Baleares adopta esta medida, de acuerdo con el Ayuntamiento, en el marco del Plan de movilidad urbana sostenible de Maó, aprobado en diciembre de 2019, que incluye un estudio previo, realizado por un empresa especializada. Este documento es de acceso público y se puede consultar en el apartado de Movilidad de la web municipal. Así, el Plan de movilidad de Maó contempla una serie de cambios en el sentido de circulación de vehículos a diferentes vías de la ciudad, con el objetivo de descongestionar los tramos más conflictivos del tráfico rodado de la ciudad y avanzar hacia una movilidad más lógica y más sostenible.
Un claro ejemplo es el tramo de Fort de l’Eau, que se encuentra entre la rotonda del ancla y la de Abu Umar, que concentra el paso de más de 18.000 vehículos durante los meses de verano; en aquella zona, estos cambios permitirán eliminar todo el tráfico que accedía desde el puerto.