El jefe de la Agrupación de Protección Civil de Maó, Biel Bisquerra, ha presentado su dimisión por motivos personales y señalando su disgusto por algunas actuaciones de las administraciones. Y es que Bisquerra es un defensor acérrimo del voluntariado al que considera que se le ha de dar apoyo y formación y echa en falta una mayor implicación de las instituciones en el trabajo que realizan.
Ha estado 16 años al frente de la Agrupación de Maó y sus problemas de visión hace tiempo que le habían llevado a delegar algunas de sus funciones.
La concejala de Servicios Generales del Ayuntamiento de Maó, Maria José Camps, se ha puesto en contacto con él para agradecerle el trabajo realizado, “ha sido y sigue siendo referente para muchos. No se va a desvincular porque él ha dedicado su vida a la protección civil y quiere seguir formando y animando a la gente que quiera ser voluntaria pero para eso necesita la complicidad de las administraciones, que es lo que él siempre reivindica”.
Camps destaca que “tiene razón porque prestan un servicio que es muy importante” y ahora las agrupaciones locales de Protección Civil de la isla no están en muy buena situación debido a la falta de voluntarios, “hace falta captación de relevos porque este trabajo implica que además tienes tu trabajo y tu vida y quien lo hace, lo vive, por lo que Bisquerra necesita esta reivindicación, hacerlo atractivo para que haya más voluntarios”.
En 2019 la Agrupación de Maó contaba con una treintena de voluntarios y puso en marcha una campaña porque querían llegar a los 45.
La Agrupación de Protección Civil de Maó se creó en 2004, y es un organismo local que desarrolla, de manera voluntaria y no remunerada, trabajos de apoyo, ayuda, asistencia y colaboración a las fuerzas y cuerpos de seguridad en casos de emergencias, como incendios o inundaciones, así como en eventos de gran afluencia ciudadana.