El mantenimiento de los grupos de convivencia estable formados por alumnos y docentes de una misma clase son claves para cortar la transmisión del virus, según la directora general de Salut Pública i Participació, Maria Antònia Font: “Seremos muy estrictos a la hora de mantener los grupos de convivencia estable en los centros educativos”.
En rueda de prensa conjunta con el conseller de Educación, ha informado esta mañana sobre el protocolo de actuación que deberán seguir los centros durante el nuevo curso. Ningún alumno puede acudir a la escuela con síntomas compatibles con Covid-19. En caso de presentar una temperatura corporal superior a 37,5°, tos brusca o dificultad respiratoria deben avisar al centro y buscar asistencia sanitaria.
Ante un posible caso, el alumnado y profesorado que sea contacto estrecho podrá acudir a clase al día siguiente, pero deberá evitar el contacto social (extraescolar, visitas, compras, parques infantiles…) excepto con los convivientes. No será así para los hermanos del supuesto enfermo, que tendrán que esperar a que el alumno con síntomas tenga un resultado negativo en la prueba PCR.
Tres positivos se considerarán un brote
Con tres positivos en un centro educativo se considerará que hay un brote, según la directora general. Si se confirma un caso de Covid-19 en el centro, se realizará un estudio de los contactos estrechos, tanto en el ambito escolar como en el entorno familiar y social del positivo, y se realizarán tests PCR. Todos los contactos deberán hacer cuarentena domiciliaria 14 días, aunque los test PCR den negativo. El afectado deberá estar en aislamiento durante 10 días en su casa.