El Código de Identificación de Resina marca el origen de y características de los plásticos de consumo. En el triángulo de Möbius, que tienen que tener impreso, troquelado o en relieve todos los plásticos, podemos conocer cual es cada cual.
En la vida cotidiana hay más plásticos de los que nos imaginamos o podemos identificar; vasos o platos, cubiertos, bolsas, celo, revestimientos, gafas, material de oficina, teclados, ratones y ordenadores, piezas de mecanismos varios, complementos de ropa. Y la lista no acaba donde llega la mirada, porque hay plásticos en piezas y componentes de muchos electrodomésticos o máquinas que nos acompañan.
Empezamos por el 1. El triángulo nos indica que son plásticos PET, o tereftalato de polietilino. Es un tipo de plástico fácil de reciclar, aunque actualmente no se está reclicando más que un 23% a nivel nacional. Está diseñado para utilizarse una sola vez en cada uso. Es transparente e impide la entrada de oxígeno y se utiliza habitualmente en botellas de agua o refrescos.
El 2 es PEAD o HDPE, o polietileno de alta densidad. Es poco opaco a la luz y tiene la capacidad de resistir altas temperaturas. Se utiliza en bolsas de compra o botellas de detergentes, zumos o leche. Este plástico es muy maleable y se puede reciclar. Actualmente su reciclado ronda el 27%
El 3 es el PVC o policloruro de vinilo. Es muy difícil de reciclar (aunque ronda el 1%) y es -según algunas fuentes- el más peligroso debido a su proceso de fabricación. Es muy ligero, resistente y duradero. Tiene alta tolerancia a temperaturas altas e incluso el fuego. Es impermeable. Sus características lo hacen ideal para utilizarse en construcción. También se usa en la fabricación de mangueras, recubrimientos de cables, productos médicos, calzado. Se cree que puede filtrar toxinas a la comida o al líquido que contiene.
El 4 es LDPE o PEBD, también conocido como polietileno de baja densidad. Es muy elástico, duro y transparente. Se utiliza gas natural para su fabricación y es muy barato. Por eso lo encontramos en bolsas de plástico, aislantes de cables, papel film, bolsas de congelar, botellas flexibles. Es más seguro que los anteriores y aunque también es reciclable, apenas se está reciclando un 1% y el producto resultante sirve para producir el mismo tipo de objetos.
El 5 es PP o poliproplileno. A diferencia del anterior, no tiene flexibilidad. Ofrece una gran resistencia al calor y por eso se utiliza sobre todo en envases reutilizables para microondas, aunque también en tapas de envases, envoltorios, utensilios de cocina, envases desechables. Se recicla aproximadamente el 3%.
El 6 es PS o poliestireno. Lo verás en envases para huevos, elementos de construcción, cubertería de plástico, envases de espumas, de CD y videos, duchas, tubos de ensayo. Es un buen aislante y resistente. Su reciclado supone generar grandes fuentes de calor, lo que hace costoso el proceso. Apenas hay constancia de que se ha reciclado un 1%. Puede filtrar estireno que causa cáncer y altera las hormonas.
El 7 es como un cajón desastre, recoge todo el resto de plásticos que no se han incorporado a las seis tipologías anteriores. Este “otros plásticos” son mayoritariamente policarbonatos que se encuentran en biberones, botellas de bebidas deportivas, envases de productos electrónicos, discos compactos, recipientes de pasta de dientes, platos precocinados para el microondas. Su reciclaje es también testimonial, apenas el 1% y puede filtrar bisfenol A dañando el código genético del individuo al que afecta.
Muchos de los microplásticos que se encuentran en el mar (y en nuestras costas menorquinas) es una ensalada variada de estos plásticos, no siempre fáciles de identificar cuando se han convertido en perlitas del mismo pequeño tamaño.
… hay un octavo, y son los tapones de la foto, que no se han de tirar, sino acumularlos en bolsas o garrafas, pues SEUR los recoge y los lleva a las empresas que fabrican plásticos, que donan unos céntimos al peso por esas partes de los envases, al tener más alta densidad, a campañas de recaudación de fondos para operar y dar cuidados médicos a niños y niñas con problemas crónicos o urgentes… es una molesta nimia y no cuesta nada llevarlos a que los recojan, y seguro que son más útiles así que tirados en un container