¿Los fines de semana también se vacuna o de momento aún no?
Bueno, no hay un modelo o un patrón fijo de lunes a viernes. El sábado pasado, por ejemplo, vacunamos. El 31 de diciembre también se vacunó. Se utilizarán los fines de semana en función de la necesidad que haya de hacerlo. También es cierto que, como sabe, en algún caso un brote en una residencia ha impedido vacunar en el día que estaba programado. En ese sentido, los fines de semana nos sirven en algunas ocasiones de comodín para recuperar las previsiones y no retrasarnos en el planning.
¿Se prevé que los militares ayuden en las tareas de vacunación?
De momento no parece que sea necesario. No obstante, si llegase el momento en que fuera necesario, lógicamente habría que verlo.
Reservamos ahora algunas vacunas por prudencia, para garantizar que habrá para las segundas dosis
¿Por qué no se administran todas las dosis así como van llegando en lugar de guardar algunas en la nevera?
Se hace ahora inicialmente así por el principio de prudencia. En Balears hemos tenido alguna que otra dificultad para que llegasen las dosis cuando correspondía, por el hecho insular. Por tanto, partiendo de ese principio de prudencia parece razonable reservar las segundas dosis. Como sabe, el proceso de vacunación se completa al administrar una segunda dosis a una persona al cabo de tres semanas. Pues bien, esa segunda dosis es la que nosotros inicialmente hemos reservado. Según vayamos viendo que hay fluidez en la recepción de las dosis, podremos reservar un porcentaje menor y aventurarnos a vacunar más.
Tras las residencias, seguirán los centros de dependencia. ¿Luego vendrían ya los sanitarios?
Serían aquellos que el Ministerio de Sanidad define como sanitarios de primera línea, es decir, los profesionales que están más expuestos al virus, por trabajar por ejemplo en Urgencias o en las UCI, o manipulando muestras. En ese contexto, creo que es importante aclarar que no sólo se vacunará a los sanitarios en esa fase, sino también a todas las personas que trabajan en esos ámbitos hospitalarios —administrativos, personal de limpieza, guardas de seguridad…— y que están también expuestas.
Cualquier fármaco puede provocar potencialmente algún tipo de efecto adverso
¿Y a continuación ya nos vacunarán a todos los demás?
No exactamente. La vacunación se ampliará a continuación al resto de profesionales de la organización sanitaria. Después de ese grupo de profesionales sanitarios, vendrá el grupo de grandes dependientes que no estén en residencias, sino en sus propios domicilios. A partir de ahí, lo que queda pendiente es que la Ponencia de Vacunas nos termine de confirmar cuál será el siguiente grupo. Todo apunta a que podrían ser personas mayores de una determinada edad y con ciertas patologías. Pero eso aún se tiene que confirmar.
¿Qué es la Ponencia de Vacunas?
Es el organismo que elabora las directrices científicas del plan de vacunación.
¿Al llegar el verano podría estar ya vacunado, como se predijo, el 70 por cien de la población?
Yo creo que decir que quizás al inicio de la temporada alta esto podría ser así, es una aseveración que habría que coger con pinzas. En cualquier caso, tampoco soy capaz de decirle ahora mismo en qué momento va a llegar ese punto, porque dependemos de muchos factores externos y de muchas cosas que se tienen que concretar más, como por ejemplo las dosis que finalmente llegarán o la propia situación epidemiológica. Ofrecer certezas en un escenario como el actual es difícil. Por supuesto, todos deseamos llegar a ese punto y vamos a trabajar todo lo que esté en nuestras manos para que así sea, pero se tienen que dar muchos factores para conseguirlo.
La vacunación va a ser la única forma que tengamos de poder ver acabar esto
¿Se puede aumentar ahora el ritmo de vacunación?
De momento sólo contamos con una única vacuna —la de Pfizer—, pero la previsión que tenemos es que en breve aparezca una segunda vacuna, que será la de Moderna. Como usted sabe, se está probando ahora mismo y es posible que a lo mejor en cuestión de diez días tengamos dosis disponibles de esa segunda vacuna. Por eso la planificación tiene que ser necesariamente flexible.
¿Tardaremos años en estar todos vacunados?
Bueno, la velocidad de la vacunación irá aumentando en función de las dosis que vayamos recibiendo.
Con las nuevas cepas del Covid-19, ¿perderán eficacia las actuales vacunas?
Aún es pronto para determinarlo. Por el momento y por los estudios que hay, no parece que vaya a ser el caso. Pero es demasiado pronto para poder tener certezas en ese sentido.
Preocupan mucho los posibles efectos secundarios de las vacunas del coronavirus…
Cualquier fármaco puede provocar potencialmente algún tipo de efecto adverso. Los efectos más habituales son leves, pero puede ocurrir que haya algunos graves. Los efectos adversos son una cosa relativamente habitual en cualquier vacuna. Pasan en la vacunación de la gripe o en la del sarampión y pueden pasar en cualquier otra vacunación. En este caso ocurre exactamente lo mismo. Y dada la dimensión del problema y de la vacunación, seguro que habrá algunos efectos secundarios. Esto es así. Estadísticamente ocurren estas cosas. Por otra parte, hemos de recalcar que estamos al inicio de una campaña de vacunación a nivel mundial, con todos los ojos del universo puestos en esto.
¿Usted se vacunará?
Sí, por supuesto —sonríe—. No tenga la más mínima duda. Además, recomendaré a mis padres, a mis familiares y a mis amigos más cercanos que también se vacunen. Sin la más mínima duda.
Y a los demás, ¿nos animaría también a vacunarnos?
Sí, igualmente. Piense que estas vacunas han seguido los mismos procesos de seguridad que sigue cualquier otro medicamento que se aprueba y que no cuestionamos. Además, ahora mismo estas vacunas son la mejor estrategia que tenemos para combatir la pandemia, más allá de la mascarilla, el lavado frecuente de manos y la distancia de seguridad. La vacunación va a ser la única forma que tengamos de poder ver acabar esto. En general, las vacunas son seguras y salvan millones de vidas anualmente. En ese sentido, intentaría transmitirle a la gente un mensaje de confianza en la ciencia.
*Una entrevista de Josep Maria Aguiló.
