La empresa encargada de la mejora del tramo de la carretera general entre Maó y Alaior, la UTE formada por Dragados y Antonio Gomila, y el Consell han alcanzado un acuerdo para resolver el proyecto sin que se paguen indemnizaciones. Lo anunció este miércoles la presidenta del Consell de Menorca, Maite Salord.
El acuerdo implica que el Consell pagará 1,6 millones de euros por las obras ya ejecutadas, más otras cantidades menores por otras actuaciones. El resto del dinero que se iba a invertir, 7,5 millones aproximadamente, no se abonarà.También hay un acuerdo para que ninguna de las partes demandará a la otra.Por ahora se mantendrá el actual trazado aunque se aplicarán medidas especiales de seguridad vial.
El preacuerdo se cerró el lunes entre las dos partes y ahora se llevará al pleno insular de este mes el próximo día 15. Luego se abrirá una segunda fase para buscar una empresa que se haga cargo de los trabajos no ejecutados. Se espera que las obras pendientes de este tramo se realicen a lo largo de 2017.
El nuevo proyecto que deberá aprobarse y adjudicarse tendrá en cuento los criterios medioambientales del actual gobierno insular contrario a todas las macrorrotondas de doble nivel por las que apostó el anterior ejecutivo insular del PP. Paralelamente se seguirá trabajando en el resto de tramos de la carretera general.
