La paralización de las obras de mejora en el tramo Maó-Alaior de la carretera general que decidió el Consell de Menorca ha llevado a los consistorios a un cambio de actitud hacia la institución. Si se va a diseñar un nuevo proyecto quieren tener voz en el mismo para que se contemplen las necesidades de los municipios por la cantidad de vías rurales que se verán afectadas.
La petición se la hizo llegar la alcaldesa de Alaior Coia Sugrañes a la presidenta del Consell, Maite Salord, y la edil de Maó, Conxa Juanola también manifestó su interés en el tema como municipio afectado.
Sugrañes también insiste en que se adopten medidas de seguridad vial adicionales en este tramo ya que en verano el parque de vehículos se incrementará y la mejora de la carretera no estará lista hasta finales de 2017 como pronto.