No ha sido un partido excelso. No se guardará en las hemerotecas. Sin embargo, el Real Madrid y Sergi Llull han tirado de oficio y se han llevado la victoria de la casa del Zalguiris Kaunas. Ahora, el equipo blanco se planta con 6 victorias en el Top 16 y el objetivo debe ser acabar el grupo en uno de los dos primeros puestos para contar con el factor cancha a favor.
En un estadio lleno -era día festivo porque se celebraba la independencia de Lituania– la escuadra de Pablo Laso tardó en arrancar. Los dos primeros parciales (17-13 y 41-39) cayeron del lado local. De hecho, los jugadores entrenados por el mítico Sarunas Jasickevicius se marcaron un 7-2 de inicio. Defendían de forma agresiva y en ataque se encontraban con un inspirado -y veterano de mil batallas- Jankunas. Llull solo se cobró seis puntos en 40 minutos, aunque tuvo tiempo de cerrar el descanso con un canasta de tres sobre la bocina. Este tipo de situaciones ya se están casi convirtiendo en una marca de la casa.
El Real Madrid se marcó un parcial de 12-23 en el tercer cuarto y ya rompió el partido. Andres Nocioni calibró su mirilla desde el perímetro, Lima aportó brega y el Chacho y el playmaker menorquín manejaron el tempo del encuentro. El tercer cuarto finalizó con un marcador de 53-62 y desde ahí los blancos jugaron con la diferencia. La cita finalizó con un amplio marcador (75-90) y el actual campeón comienza a dar señales claras de recuperación. Rudy ya entrena con normalidad y parece que el calvario de las lesiones de los jugadores clave ya ha sido superado. Ahora, solo cabe apretar los dientes y luchar por todos los títulos que quedan.
@jlgllagues