Los pronósticos se han confirmado y el viento del Norte, fuerza 7 a 9, sopla en todo el litoral de Menorca dejando olas de más de seis metros y una sensación térmica de un grado. Las ráfagas de viento, que han alcanzado picos de 100 kilómetros por hora, mantienen la Isla incomunicada por vía marítima, mientras que el Aeropuerto de Menorca opera con normalidad, según fuentes de Aena, si bien los pasajeros están notando los efectos del temporal, sobre todo, en el aterrizaje y el despegue.
No se ha registrado ningún incidente de gravedad, si bien la tramuntana, que no soplaba así desde 2001, se ha cobrado sus víctimas en forma de motos, farolas o vallas en el suelo, ramas arrancadas de cuajo, un par de pinos derribados o techos de algunas naves industriales dañadas, caso de las que albergan una marina seca en el polígono de Sant Lluís. La Agencia Estatal de Meteorología mantiene el aviso nivel rojo hasta la medianoche, momento en que éste cambia a naranja.