El Obispado de Menorca rechaza categóricamente mantener a Carme Mascaró como catequista del Centre Sant Miquel. Esgrime como razón la 'coherencia'. Así lo señala en un comunicado emitido pro la Diócesis este mismo lunes a las pocas horas de salir publicada la noticia del veto a una catequista en Ciutadella tras casarse por lo civil con otra mujer.
En su réplica los portavoces de la Iglesia indican que "en la comunidad eclesial, a medida que aumenta la responsabilidad de sus miembros se exige un mayor grado de compromiso. Además de poseer unas cualidades objetivas por parte de los que ejercen algún cargo, también se valora mucho la ejemplaridad de vida que debe ser un referente claro para los demás.
Todos estamos llamados a la santidad, en la comunión en el seno de la Iglesia, pero a la hora de incorporarse a una asociación o de ejercer algún cargo de una mayor responsabilidad se pide un plus de credibilidad para parte la persona que debe asumir una función específica, por lo que la misión que se le encomienda sea fructuosa y que la persona en concreto no pueda suscitar ningún tipo de escándalo en los fieles."
El Obispado también deja claro lo que rechazan de la vida personal de Mascaró y niegan que se la esté excluyendo o conculcando algún derecho adquirido. "Respetamos, aunque no compartimos, su decisión de contraer matrimonio civil con otra persona del mismo sexo. Pero de acuerdo con lo expuesto más arriba, vemos que nos situamos en el campo de la incoherencia, ya que contrajo matrimonio civil con una persona del mismo sexo supone públicamente no aceptar la enseñanza de la Iglesia sobre el matrimonio, lo que, a nuestro juicio, aconseja que deje de enseñar la fe cristiana a los más jóvenes. Así se le ha hecho saber, primero a través de los responsables de centro y luego personalmente.
Ser catequista es una misión que la Iglesia encomienda a determinadas personas para que, en su nombre, enseñen la fe que ella profesa. No existe un derecho previo a ser catequista. Corresponde a la Iglesia valorar las cualidades que debe tener un catequista antes de confiarle o retirarle esta misión, sin que ello suponga discriminación ni exclusión. En este mismo contexto de la credibilidad y de la coherencia, nos sentimos responsables de garantizar a los fieles que la doctrina impartida en nuestras catequesis se corresponde al pensar y sentir de la Iglesia. Los fieles tienen derecho a pedirnos que los catequistas estén bien formados y que sean coherentes con lo que enseñan."
Desde la Diócesis sí se le permite seguir colaborando con el Centre Sant Miquel pero en otras labores como el coro, teatro o la animación en el tiempo libre, pero se la veta en la enseñanza de la doctrina cristiana. También se le mantiene su trabajo como técnica en Cáritas Diocesana.
https://menorcaaldia.com/2020/10/26/el-obispado-de-menorc.../
El Obispado rechaza mantener a la catequista por 'coherencia'
