El alcalde socialista de Es Migjorn Gran, Pere Moll, sólo dejará la alcaldía si le echan. En declaraciones a Radio Menorca, el edil explicó que no existen motivos para su salida del cargo y por ello reta a sus compañeros de partido que presenten una moción de censura en un pleno.
Moll asegura que existe un “complot” y que sólo ve “intereses personales y gente con ganas de ocupar su cargo y su sueldo”, pero no razones solidas que justifiquen la postura en su contra.
El aún edil recalcó que “quien quiera ser alcalde que lo haga como yo que primero me pase cuatro años de concejal y después gané dos elecciones. Lo que no quiere la gente es alguien que acceda a la alcaldía sin el respaldo de las urnas”.
No obstante en el PSOE la visión es diametralmente opuesta. La asamblea local socialista de Es Migjorn le destituyó como secretario general local y le exigió que dimitiera de su cargo en el consistorio. Le echaron en cara pérdida de confianza, ocultación de datos y una serie de ausencias inexplicadas. Moll rechaza estas acusaciones y apunta que dispone de justificantes médicos para estas bajas.
Por su parte, la presidenta de la gestora que lleva el partido a nivel insular, María José Camps, ha tomado partido por los detractores de Moll y afirma que se repetará la decisión de la junta local de Es Migjorn.