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El lunes empiezan a excavar la fosa común de Bunyola en donde se busca a tres menorquines

Se trata de los hermanos Bartolomé y Sebastián Carretero Gornés, y José Filomeno Pons Sintes asesinados en 1936

Inicio de la excavación.
Inicio de la excavación.
El conseller Miquel Àngel Maria acudió al anuncio del inicio de los trabajos para tratar de identificar a los tres menorquines represaliados y asesinados por los golpistas en 1936. (Foto: CAIB)

La Conselleria d’Administracions Públiques iniciará este lunes, 31 de agosto, las excavaciones en el cementerio municipal de Bunyola con el objetivo de localizar la fosa común donde fueron enterradas las quince víctimas de la represión franquista, de las que se tiene constancia documental según se anunció este sábado. La previsión inicial es que la intervención en el cementerio de Bunyola se lleve a cabo entre los días 31 de agosto y 10 de septiembre de 2020. Se cree que allí yacen desde 1936 tres menorquines.

Se trataría de los hermanos Bartolomé y Sebastián Carretero Gornés, y José Filomeno Pons Sintes. Los tres, naturales de Ciutadella, viajaron juntos a Mallorca para hacer de testigos en un juicio. Se cree que fueron asesinados el 12 de noviembre de 1936 y enterrados en Bunyola. Por aquellas fechas aparecieron tres cadáveres en la confluencia de la carretera de Esporles a Santa María del Camí con el torrente de ca na Sili. eran tres cadáveres que pertenecían a tres personas desconocidas en Bunyola. El historiador y director del Archivo Diocesano de Menorca y del Archivo Municipal de Ciutadella, Marc Pallicer Benejam relaciona este episodio con el descubrimiento de los tres ciudadelanos a la fosa común de Bunyola.

Junto a ellos se buscan otros doce cuerpos. Nueve son personas identificadas, pero hay seis que aún no. Entre estos últimos podrían estar los menorquines.

Entre el 6 de agosto y el 28 de diciembre de 1936, llegaron al cementerio de Bunyola una quincena de cadáveres. Eran hombres que habían sido asesinados por arma de fuego y abandonados en la acera de caminos o carreteras, víctimas de la represión franquista. Antes de ser enterrados fueron objeto de autopsias que determinaron que la mayoría de ellos murieron por hemorragia cerebral, pleural, múltiple, etc.

La consellera Isabel Castro ha destacado como la exhumación de fosas “es fundamental para reparar la memoria de las víctimas y poder conocer la verdad de los hechos que sucedieron. Lo hemos visto en Sencelles, en Son Coletes y en Bunyola nos mueve el mismo objetivo: dar respuesta a las familias que nunca han dejado de buscar a sus familiares desaparecidos “.

En palabras del secretario autonómico de Memòria Democràtica y Bon Govern, Jesús Jurado, “las familias de las víctimas se merecen unas instituciones públicas que velen por los derechos humanos e impulsen la búsqueda de los asesinados y desaparecidos. En Bunyola buscamos 15 personas y haremos todo lo posible para encontrarlas. Pero hay que ser prudente porque el cementerio ha sufrido profundas modificaciones “.

Se han establecido 3 zonas de excavación: la Zona 1 corresponde a la zona ajardinada -de 6,30 m por 4,80 m- que excavará manualmente para evaluar la posibilidad de que se construyera un hoyo para albergar algunos de los asesinados en 1936; la Zona 2, que corresponde en su origen a una fosa común excavada en 1932, donde fueron enterrados 10 individuos a partir de la documentación del proyecto “Todas las Causas” de la asociación Memòria de Mallorca, y donde se analizará la posibilidad de exhumar los cuerpos más modernos para ver si debajo todavía quedan restos humanos de 1936. Finalmente, también se analizará el osario actual, que se ubica actualmente entre dos hileras de nichos -Zona 3-, ya que podría contener cuerpos procedentes de las limpiezas realizadas en la fosa común. Ahora bien, sería posible que una gran acumulación de restos humanos más recientes cubran los cuerpos de 1936 e hiciera inviable su retirada.

Actualmente, se desconoce con exactitud la ubicación de la fosa común de los individuos represaliados por el régimen franquista en 1936 y enterrados en el cementerio de Bunyola. Se tiene indicios de que se situaría en la parte sureste, un lugar que ha sufrido grandes modificaciones, como la construcción de nichos.

 

 


Comment

  1. … represión franquista con la inestimable ayuda y beneplácito de los supuestamente piadosamente cristianos seguidores de la iglesia, e incluso ésta misma secta religiosa, que no se limitaba a mirar hacia otro lado, sino que colaboró activamente en la denuncia e incluso ejecución física en algunos casos, de los perdedores de la contienda… la iglesia, y toda la basura que esconde debajo de la alfombra aún ahora…

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