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La demografía menorquina sigue con registros negativos

Los últimos estudios contemplan que la pandemia y la crisis acentúan el envejecimiento de la población

Las canas nos delatan
Las canas nos delatan
La natalidad escasea y la crisis económica no ayuda

Los datos que recogía en el estudio de 2016 el Observatorio Socioambiental de Menorca (OBSAM) ya advertían de la tendencia de la curva estadística. Menorca pierde población. En 2015, Es Migjorn Gran es el municipio que pierde más población, llegando casi al 3%. En la otra cara de la moneda se encuentra Sant Lluís, que es el único municipio con un crecimiento positivo, a pesar no llegar al 1%.

En el conjunto de las Islas Baleares, se registraba un crecimiento ligeramente positivo. Estas tasas negativas contrastan con la situación que se vivía seis años atrás, en que todos los municipios registraban tasas positivas.

Entonces destacaba el crecimiento de Es Mercadal, situado por encima del 5%, y el de Sant Lluís, por encima del 4%. Estas dos poblaciones también son las que han asumido la tasa de migración mayor, de más personas extranjeras que han decidido sentar su residencia aquí.

La relación entre demografía y crisis económica se conoce y la situación de pandemia podría estar agravando o acelerando el envejecimiento de la población al no tener una seguridad o confianza en el futuro por parte de las familias jóvenes con posibilidad de procrear. Eso también supone añadir presión a cómo sostener a nivel socioasistencial a una parcela de la población mayor que vive más años y que aumenta su número.

Menorca tenía en 2015 una población de 92.348 personas. En el año 2014 se produjeron ocho nacimientos por cada mil habitantes (8%) en Menorca. Esta cifra es casi dos puntos inferior respecto al conjunto de las Islas Baleares. Ferreries es el municipio con la tasa más elevada, por encima del 10%, siendo el único que supera la media balear. En cambio, Es Migjorn Gran y Sant Lluís son los municipios donde se registran menos nacimientos, con unos valores por debajo del 5%.

Estas cifras son el resultado de una tendencia a la baja que se inició en el año 2008, año en que la tasa se situaba por encima los diez nacimientos por cada mil habitantes en la mayoría de los municipios de Menorca. Si en 2020 no se había frenado la tendencia de baja natalidad, es probable que ésta sea más destacada en los próximos meses.


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