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Restaurantes de Menorca se interesan por el envío de sus menús a los yates vía dron

Este sistema se acaba de poner en marcha en Ibiza y ya se han mantenido conversaciones para implementarlo en Isla para llevar comida a los barcos fondeados en el litoral

Servicio premium en el reparto de comida
Servicio premium en el reparto de comida
Foto; Pixabay

Una empresa de servicios turísticos de lujo y otra empresa de pilotos de dron se han puesto de acuerdo para servir comida y bebida a los yates que fondean en la costa de Ibiza. Es una experiencia novedosa que no se había realizado en ninguna otra parte.

La legislación marca prohibiciones para el vuelo de drones en la mayoría de zonas terrestres, pero el servicio de llevar paquetes de hasta 5 kilos sobrevolando zonas no pobladas ni playas públicas en dirección hacia una embarcación fondeada no supone ningún problema. Y las pruebas que se han realizado hasta el momento lo han hecho ya una realidad en Ibiza, donde esta semana comenzó a operar Drone to Yacht.

El primer pedido realizado fue de unas pizzas y dos botellas de vino, que salieron de la cocina de un restaurante de costa de Ibiza y fueron hasta un yate fondeado en la costa. La bolsa con el contenido se descolgó por un cable de hasta 20 metros a la embarcación, donde recogieron el pedido y dieron buena cuenta del contenido del paquete.

La semana anterior, los responsables de la empresa estuvieron en Menorca, donde tomaron contacto con algunos restauradores que ya han mostrado su interés en ofrecer su menú para llevar a los navegantes que muestren interés en no bajar del barco para recibirlo en su cubierta.
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avier Pereira, gerente de la empresa gallega Aerocámaras, explicaba en una entrevista en Radio Menorca que esto es sólo el principio puesto que ya están trabajando para optimizar sus equipos de manera que puedan aumentar el catálogo de productos a transportar, incluyendo medicamentos.

También quieren aumentar la potencia eléctrica de los drones que les permita superar los 32 nudos de velocidad, mejorar su estabilidad en condiciones de viento, aumentar la capacidad de carga y también la autonomía hasta los 15 kilómetros.

Según un estudio, el ahorro de costes en este tipo de servicio podría suponer un 53% respecto al delivery tradicional, lo que podría facilitar en el futuro que se desbloqueen las actuales restricciones de uso de drones para el transporte en zona terrestre.


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