El regatista del Club Nàutic Ciutadella Felip Moll quiere que se anulen los tiempos de la primera etapa de la Mini Transat entre la salida en Francia y el puerto de La Palma en Canarias. El motivo es la decisión que tomó el comité de regatas de llevar la flota a puerto al pasar por Finisterre ante la llegada de un frente de borrascas hace unas semanas.
Las instrucciones no fueron ni claras ni controladas por lo que no se equilibró el tiempo que cada participante de esta regata permaneció en tierra. Estas órdenes confusas motivaron que hasta 19 navegantes protestaran formalmente. El jurado internacional de la regata dictó entonces un bonus general de 24 horas para todos los participantes excepto los cuatro primeros. Pero la medida no ha satisfecho a los competidores y Moll ha pedido que se anulen los tiempos de la primera etapa.
La segunda manga empezará a finales de mes con salida desde La Palma y llegada a la isla de Guadalupe en el Mar Caribe en una travesía en solitario.