El cupón de la ONCE del sábado, 16 de abril, estará dedicado al 250 aniversario de la ‘Cofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo’ de Maó. Cinco millones y medio de cupones difundirán esta celebración.
Vinculada a los obreros del antiguo Hospital de caridad de la ciudad, la Cofradía se crea a expensas de algunos ciudadanos devotos del misterio que le da su nombre, “La Sang”, misterio reflejado en una imagen de Cristo crucificado que ya se veneraba en Maó desde siglos atrás en el antiguo oratorio dedicado a la Santísima Trinidad, anexo al Hospital de caridad. En 1772, el Papa Clemente XIV la funda en respuesta a la petición que un año antes hacían cinco maoneses.
En su origen tuvo su sede en un pequeño oratorio dedicado al Buen Pastor, junto al nuevo hospital que se construyó. En 1868, el oratorio se cierra por orden municipal y se traslada a su actual sede, la contigua iglesia de San José.
Las procesiones del Jueves y Viernes Santo ya existían desde el siglo XVI y la cofradía de “La Sang” participaba en ambas, organizando y rigiendo la primera de ellas hasta 1876, año en que es suprimida. Desde entonces, la cofradía participa de las procesiones de Semana Santa en la tarde del Domingo de Ramos, llamada del Viacrucis y en la del Santo Entierro en la noche del Viernes Santo. En 2014 se restaura la procesión propia de “La Sang”, también denominada “del Silencio” por sus características.
Las antiguas imágenes titulares de la cofradía fueron pasto de las llamas al inicio de la guerra civil, en 1936. Las iconografías del Paso de “La Sang” lo forman el Cristo Crucificado y Santa María Magdalena abrazando la cruz,
imágenes talladas en 1940 por el escultor alemán Waldemar Feen, en madera procedente del barco prisión ‘Atlante’, testigo mudo de tristes hechos acaecidos durante la mencionada guerra civil española.
La figura de Cristo muerto en la cruz tiene aproximadamente metro veinte de altura con proporciones muy bien repartidas. A Santa María Magdalena, la encontramos semisentada sobre las rocas que dan apoyo a la cruz y abraza a esta, con sensación de agonía y angustia.
En 2015 se adquiere una nueva imagen de Santa María Magdalena del Santo Entierro para ser procesionada en el Viernes Santo, tallada por un prestigioso imaginero lucentino, Fco. Javier López del Espino. La cofradía mantiene su actividad, no tan solo durante la Semana Santa sino el resto del año con actos de culto a sus titulares y otras obras de caridad de las que destacan sus contribuciones al banco de alimentos regentado por las voluntarias de las Hijas de la caridad de San Vicente de Paúl.
José Vilaseca Rius, delegado territorial de la ONCE y Matías Marino Homar, presidente, de La Cofradía, acompañados de Antonio Sorá Vadell, vicepresidente del Consejo Territorial de la ONCE y Gerardo Villalonga Hellín, administrador diocesano, han presentado el cupón este jueves, en el Salón de Actos de la Casa de la Església.
