La 0 Plastic Menorca Diving Expedition desarrolló del 22 al 25 de septiembre varias actividades para concienciar sobre el problema medioambiental que supone la presencia de este material en el mar y, particularmente, el que no se ve. Ciertos plásticos flotan y se pueden retirar de manera más fácil de la superficie e incluso aquellos que la marea trae a las costas. Sin embargo hay muchos plásticos que se quedan en el fondo o que, convertidos en fragmentos tan pequeños que se confunden con arena, quedan varados en la costa.
En colaboración con 25 organizaciones de Menorca, 0 Plastic Menorca ha desarrollado salidas de buceo, snorkel, recogida a pie de playa e incluso charlas educativas para recoger (y sobre todo concienciar) sobre el problema que provoca el plástico en el ámbito marino.
Los datos que aportan asociaciones ambientalistas como Oceana son preocupantes; el 70% de los residuos plásticos que hay en el mar se van al fondo y permanecen allí mucho tiempo provocando la muerte a todo tipo de especies animales. Con el tiempo ese plástico acaba en la cadena trófica y llega a introducirse en la cadena de alimentación de la que comen los humanos.
0 Plastic Menorca propone un turismo consciente y responsable porque entiende que el movimiento de millones de personas que vienen y van a nuestras costas es un elemento que afecta al aumento de presencia de contaminación por plásticos.
En las ediciones anteriores, estas acciones consiguieron movilizar a 70 voluntarios, sumando 13.000 microplásticos recogidos y media tonelada de plástico. Los organizadores quieren impulsar la circularidad y reutilización del plástico así como otros residuos que encuentran en sus expediciones a la costa. Artistas como Jimmy Pons utilizarán galletas de petroleo encontradas en la costa como base para confeccionar obras de arte y la empresa South utilizará tapones de botellas para fabricar anillos, siguiendo la estela de la campaña Eco, ocean, change.