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“Avería en la fontanería”

Un artículo de Adolfo Alonso


Habíamos descubierto, desde la aparición del personaje Villarejo y las fotos de una vedette de apellido y gusto regio, que teníamos cloacas. Los “poceros” son unas personas que trabajan bien en los niveles de las alcantarillas. Los hay dignos trabajadores que se ganan su vida con su profesión, pero hay “poceros” de guante blanco, que bajan a las alcantarillas del ser humano y del Estado, sin mancharse. Estos ganan mucho más que los primeros. Husmean, remueven, hacen operaciones sin ningún límite ni moral. Van a lo que sea y, especialmente a ganar dinero con el chantaje de airear la porquería. Esto sí, lo que tienen es que son un poco “freelance”. Van por libre o contratados por unos o por otros, moviendo dinero en negro, como es fácil de comprender, pues su medio son las aguas fecales.

 

Pero no sabíamos que la fontanería política había llegado a la perfección de lo que hemos visto esta semana, ni siquiera que existían fontaneros especializados en las tuberías que llevan a las cloacas políticas.

 

Por poner un ejemplo que me pueda servir. Fontaneros fueron los que pusieron micrófonos ilegalmente en el Hotel Watergate, en USA. Eran otros tiempos y Nixon tuvo que dimitir.

 

“Fontanero” es el personaje “Koldo” por ejemplo.  “Pocero” puede ser algún líder de alguna formación que está en la Unión Europea.

 

Está claro que en la actual situación tenemos “poceros” y “fontaneros” por muchos lados y a lo que van es a intoxicar y derribar a todo lo que sea un peligro. En estos momentos todo lo que no sea “comer del pesebre”, utilizo por educación una frase elegante, es un impedimento, y no se puede dejar sin dinamitar. Los “fontaneros” son personajes que se mueven en niveles de poder, secundarios o terciarios, como por ejemplo dirigiendo la filatelia nacional. Pasan desapercibidos, salvo los mítines y las caritas, dulzonas de nube de azúcar, con ojillos tiernos. Como madres viendo a hijos en el partido del patio del colegio.

 

Aldama salió de la oscuridad, y parece que sabe un montón. Ábalos, Aldama, Dolset, Leire, Koldo, Santos, Bárcenas, la pareja de de Ayuso, el hermano de no sé quién. Esto nos ha puesto de manifiesto que hay mucho “tapado” en puestos secundarios, que funcionan como “poceros” y como “fontaneros” por libre y por la causa.

 

¿A ver si el poder real efectivo va a estar en los desapercibidos de tercera línea? En los de la foto del “yo pasaba por allí” y aproveché el clic de la cámara. Santos Cerdán sabe mucho de esto por lo que se ve y, a lo peor,  se ha quemado ya. Santos parece el jefe de los fontaneros del PSOE.

 

La esposa del presidente del gobierno, las maniobras de cloaca para desestabilizar a la jueza que lleve el tema del hermano del presidente, con recusación extemporánea y mala fe procesal de un ex juez que ha sido condenado por violencia de género y apartado de la carrera judicial. El ataque que ha sufrido el juez que instruye las diligencias de Doña Begoña. Las maniobras anti UCO (no entiendo como el ministro del Interior sigue en su cargo sin dimitir, supongo que debe estar pasándolo mal. O eso, o que nos expliquen a los españoles la película de James Bond).

 

El PP no está para hacer fiestas. Ayuso está pasada de revoluciones. Como le han tocado el amor propio se ha rebelado. Pobrecita. Le costará la carrera. Le quedan los gestos extemporáneos y la evolución hacia la extrema derecha. Feijoo no da para más. Con la política que ha llevado puede que gane unas elecciones pero seguro, segurísimo, que no será el presidente de todos los ciudadanos del Estado, y seguiremos en la misma. Esto es muy malo para la actual configuración constitucional del país. Los partidos independentistas estarán encantados. Tan solo han de estar en silencio y dejar que corra la bola sin aplicar fuerza. Todo está ya encaminado por la rampa. No importa el diámetro de la bola ni su masa, lo que cuenta son las fuerzas que inciden en el descenso, nos explicó Newton con la gravedad. Es una cuestión de tiempo, y no hay prisa.

 

Lo que parece claro es que en el PSOE hierven demasiadas cosas como para difuminar la influencia de una tendencia socialista, no identificada con la actual secretaría general ni con su política. Comprendo que es difícil, pero tanto juego malabar ha desdibujado los principios, y la gente se resiente. Dice el ministro de Transportes que Madina y otros no ganarían una asamblea en su pueblo. Gracias a Dios que no la ganarían, si lo que tenemos son Leire, Koldo,Abalos, familia, Santos, amigos, mejor que la pierdan. Pero atención en Castilla La Mancha sí que las ganan y el PP está sin discurso serio y creíble, lo que hace pensar en que ese PSOE marca tendencia.

 

Quizá slos duros castellanos y especialmente las duras castellanas sean el cambio de ciclo en el partido.

 

Dentro del PSOE, veremos cosas bellas, y el PSOE histórico volverá. No será rápido, pero el cambio de ciclo se acerca.

 

El actual secretario general ha sido un genio de la política, pero la pegunta que se quedará en la historia es ¿de qué política? Este es el tema. ¿De que política?.

 

La avería en la fontanería del PSOE es lo que faltaba a la situación política.

 

 

 


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