'The Wellesley' se botó en 1993 pero se reacondicionó en 2016 para renovarlo y darle las máximas comodidades, desde un gimnasio totalmente equipado hasta un jacuzzi en la cubierta. Cuenta con otros 'juguetes acuáticos' como motos para desplazarse sobre al agua o esquís junto a otras lanchas dentro del propio yate para quien quiera disfrutar de este deporte. Lo gestiona una tripulación de doce personas y puede alojar a otros tantos huéspedes en seis camarotes que incluyen una cámara VIP y otra suite.
Su velocidad de crucero es de catorce nudos aunque puede alcanzar los 17.
