Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en coordinación con las Policías Locales del archipiélago, han extremado aún más a partir de este viernes los controles en la vía pública y en las carreteras de las Illes Balears para garantizar el confinamiento domiciliario. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado recuerdan que esta cuarentena en casa es la mejor protección frente a la pandemia. El objetivo final es evitar la propagación del coronavirus y ayudar así a salvar vidas.
Los agentes levantaron ayer jueves cerca de 700 actas administrativas por desobediencia en el archipiélago por incumplimiento de las restricciones del estado de alarma. Policía Nacional, Guardia Civil y Policías Locales detectaron 670 infracciones, 325 de las cuales se contabilizaron en Palma. La mayoría de las propuestas de sanción se debieron a personas que permanecían en la vía pública sin causa justificada y que no atendían a las reiteradas indicaciones de los agentes.
Mientras, en las carreteras de las Illes Balears se han reforzado los dispositivos de vigilancia para evitar desplazamientos innecesarios y trayectos a segundas residencias. Los agentes identificaron ayer a más de 6.500 personas y 6.000 vehículos en los más de 400 puntos de vigilancia que se activaron.
Por otro lado, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con el apoyo de las Policías Locales, han detenido entre ayer y hoy a siete hombres, cuatro en Mallorca, dos en Eivissa y uno en Menorca, por desobediencia a agentes de la autoridad por incumplir las restricciones incluidas en el estado de alarma.
La Guardia Civil detectó ayer jueves por la mañana un catamarán con bandera griega y sin matrículas visibles que había amarrado en el club náutico de Porto Petro sin autorización con motivo de avituallamiento. Los agentes levantaron dos actas administrativas por desobediencia a los dos ocupantes de la embarcación.