Es un marco incomparable, único, majestuoso. Y a partir del 1 de abril, ya se podrá visitar. La Cova de s’Aigua, en Cala Blanca, ha sido inaugurada este miércoles entre una enorme expectación y como paso previo a las visitas de multitud de curiosos, que han agotado todas las entradas para acceder al recinto durante el mes de abril. 

Las autoridades han presentado las obras de mejora de una gruta subterránea de un notable valor geológico y que fue declarada Bien de Interés Cultural en 1966 como zona arqueológica. “Permitirá a todo el mundo disfrutar de un nuevo atractivo de un enorme valor geológico, natural y arqueológico”, ha explicado Joana Gomila, alcaldesa de Ciutadella.

Los trabajos en el interior de la cueva han permitido mejorar los accesos y acondicionar el interior, que ya está listo para recibir visitas.

El proyecto de apertura de la Cova de s’Aigua se inició en julio de 2017. En octubre de 2019 el ajuntament de Ciutadella, que ha trabajado de forma conjunta con el Consell Insular para el impulso del proyecto, aprobó el permiso de instalación y obras para la apertura de la cueva de Cala Blanca.

Las visitas se desarrollarán en grupos de hasta 15 personas. Los 110 metros de la cueva se podrán recorrer en alrededor de 30 minutos. “Nos ayudará a diversificar el producto turístico y a desestacionalizar”, ha rematado Joana Gomila.