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El Senado se desdibuja en el debate entre sus candidatos en Menorca

Los seis aspirantes no aprovechan el acto en el Ateneo de Maó para concretar como defenderían la Isla en la Cámara Alta

La presidenta del Ateneu en el inicio del debate con los candidatos detrás. FOTO.- Tolo Mercadal

Difícil tarea la de organizar un acto a seis en una campaña electoral en la que más allá de debatir propuestas, reprocharse incumplimientos y elegir candidatos se está poniendo en liza el actual modelo de estado y las instituciones que lo conforman. El Ateneo de Maó ha asumido el reto y ha convocado esta tarde a los candidatos al Senado por Ciudadanos, Manel Bonmatí; Partido Popular, Juana Francis Pons Vila; Som Menorca, Pilar Arguimbau; Partido Socialista, Gràcia Mercadal; PI, Nicolás Bordoy;  y,  Brígida Mora, Podemos.

El encuentro -más coloquio que debate- ha transcurrido plácido, marcado por el respeto a los tiempos y a los contrincantes. En el contenido, temas muy recurrentes -la financiación, el transporte aéreo, insularidad, la necesidad de una voz fuerte en Madrid- y otros menos, pero también recurrentes -la corrupción, la pérdida de derechos, el retroceso del estado del bienestar- que se han abordado, preferentemente, desde la generalidad y las consignas de partido, con más razón que corazón, menos en el caso de Arguimbau, quien ha imprimido más pasión a sus intervenciones.

 

Desde la izquierda, Brígida Mora, Gràcia Mercadal, Pilar Arguimbau, Juana Francis Pons, Nicolás Bordoy
Desde la izquierda, Manel Bonmatí, Brígida Mora, Gràcia Mercadal, Pilar Arguimbau, Juana Francis Pons, Nicolás Bordoy y Margarita Orfila, momentos antes del inicio del acto. FOTO.- Tolo Mercadal

Estos temas se han entremezclado con uno de los puntos candentes de esta campaña, el papel del Senado. Han coincidido los candidatos en la necesidad de reformarlo, más que de eliminarlo (propuesta de C’s), pero han diferido en cómo. Y, en conjunto, su defensa de la Cámara Altay la concreción de qué harían como senadores en defensa de la Isla ha sido tibia, excepción hecha de Pons Vila. Por razones obvias, la hasta ahora senadora por Menorca ha sido quien ha podido acercar un poco la institución a los asistentes, en buena parte personas vinculadas a los diferentes partidos.

El control de tiempo unido a la mesura de Pons Vila, quizá motivada por no querer “abusar” de su paso por la Cámara Alta, y la inexperiencia del resto de candidatos -suplida con más acierto en el caso de ellas- ha acabado por desdibujar el contenido del acto, la candidatura al Senado, sin bien ha permitido conocer de primera mano cómo se manejan en público los diferentes aspirantes, algo que deberán hacer en caso de ser elegidos y de mantenerse la institución tal y como la conocemos.

El viernes, turno de los candidatos del Congreso.

 


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