Llevaba 18 triples seguidos fallados en los últimos tres partidos. Se le veía cansado, mental y físicamente. Ante el Baskonia firmó uno de sus peores partidos del año, con decisiones arriesgadas y erróneas. Sin embargo, Sergi Llull siempre da la cara. Y hoy lo ha vuelto a hacer. Ha firmado 18 puntos y seis asistencias, pero lo más importante es que se ha vuelto a mostrar dominador en ataque. Quizás, solamente ha pasado por un pequeño bajón.
Y es que la aportación del menorquín ha sido clave para que el Real Madrid retomara la senda del triunfo ante el Emporio Armani Milán por 90-101. El playmaker de Maó solamente se ha visto superado en números por un estelar Anthony Randolph (20 puntos, 14 rebotes), que puede causar estragos este año vestido de madridista. La aportación de Othello Hunter (18 puntos, 5 rebotes) y Rudy Fernández (13 puntos, clave en acciones defensivas) también fue importante.
Y es que los blancos han dominado el encuentro prácticamente a placer durante todas sus fases. El primer periodo finalizaba con un 20-31 en el electrónico y el conjunto de Pablo Laso ya se asentaba en ventajas de +10 en los cuartos posteriores. Solo los americanos Ricky Hickman (19 puntos, 5 asistencias al final) y Rakim Sanders (16 puntos, 6 rebotes) daba la cara por los milaneses. Sin embargo, un último arreón en los últimos 10 minutos ponía a los locales a cinco puntos (70-75) y todo parecía apretarse. Pero entonces vino el festival de Randolph y el Madrid demostró que las costuras de su patrón de juego están bien atadas. Los de Laso vuelven a ganar y dentro de un par de días de tienen otro partido. Es una temporada larga. Y el reto de llevarse al zurrón todas las competiciones que quedan está ahí.
@jlgllagues