Ciutadella se apresta a vivir el Sant Joan de la pandemia. Por primera vez en décadas los ciudadanos de Ponent no podrán bajar a los Jocs des Pla, vivir la entrada del Caixer Senyor en Es Born o acudir masivamente al ‘primer toc de fabiol’. La Covid-19 ha obligado a suspender cualquier acto masivo. No obstante, el sentimiento ‘santjoaner’ es muy grande y , como es tradicional, muchas casas de la ciudad cuelgan la bandera de esta fiesta en sus ventanas y balcones para recordar que llega Sant Joan.

A nivel administrativo se han decretado normas para evitar aglomeraciones en la calle y se ha prohibido la instalación de barras de bar en la vía pública. Se recomienda a la gente que cualquier celebración se realice a nivel familiar en casa y la policía local mantendrá un dispositivo especial para los días 23 y 24 de junio para asegurarse que se respetan estas normas.

Sant Joan tiene un elemento añadido ya que, al ser las primeras fiestas patronales de la isla, marcará la tendencia de la gente de cara a los siguientes patrones a festejar, empezando por Sant Martí a principios de julio.