Amnistía Internacional de las Illes Baleares se concentró este jueves ante el Hospital Mateu Orfila y el centro de atención primaria de Dalt Sant Joan en Maó en apoyo al derecho a la salud de pacientes no Covid. Esta acción coincide con la presentación del informe «La otra pandemia» que denuncia la falta de inversión en atención primaria previa a la pandemia y una gestión sanitaria sin planificación que ha dejado abandonadas a personas vulnerables, enfermedades desatendidas y diagnósticos que, en algunos casos, llegan demasiado tarde. Este informe se centra en el estudio de la situación de las comunidades autónomas de Madrid, Catalunya y Castilla-La Mancha, pero se considera extrapolable al resto.
Un pequeño grupo de seis personas realizó por la tarde una protesta simbólica ante los dos edificios en Maó que duró unos pocos minutos. Según Biel Olivar, miembro de Amnistía, “se han detectado graves violaciones de derechos humanos. En los últimos 10 años ha disminuido la inversión en salud, aspecto que se ha notado más con la pandemia”.
Entre los aspectos que denuncia Amnistía está la desatención a enfermos crónicos incluso de males graves como el cáncer o ancianos dependientes en un informe de 90 páginas. También se apunta que esta falta de atención sanitaria afecta especialmente a las mujeres ya que, en la gran mayoría de casos, son las encargadas de cuidar a las personas dependientes o enfermas. Por ello han sufrido de manera desproporcionada el impacto de una atención primaria desbordada y han hecho frente a una sobrecarga de trabajo y cuidados.
El estudio de Amnistía Internacional concluye pidiendo más inversión en Sanidad ya que la salud es un derecho humano.
