¡Y entre vacunas y restricciones nos ha llegado la primavera! Parece mentira cómo pasa el tiempo y lo poco que somos capaces de apreciarlo.
Tras el coranavirus, tenía la esperanza de que todo cambiara a mejor y que mucha gente transformara su vida, pero me entristece pensar que todavía hay personas que siguen ancladas a los viejos patrones, esperando que ocurra un milagro.
Entretanto, la primavera ha llegado a nuestras preciosas calles mallorquinas, y la naturaleza nos hace ver que todo vuelve a transformarse, aportando alegría a nuestras vidas.
Pero, curiosamente, debido a un síndrome denominado ‘astenia primaveral’, mucha gente se siente triste y alterada en estos días, cuando debería de ser todo lo contrario.
Las características son las siguientes:
Cansancio y somnolencia durante el día.
Falta de energía.
Alteraciones del sueño, especialmente dificultad para conciliarlo.
Irritabilidad.
Ansiedad.
Pérdida del apetito.
Cefaleas.
Disminución de la libido.
Problemas de concentración.
Falta de motivación.
Esto es debido, en gran parte, al cambio horario que se produce al comienzo de la primavera y que vivimos a finales de marzo, así como a la subida de las temperaturas. Todo esto hace que nos sintamos de esta forma.
La solución, como siempre, viene de la mano de la anticipación de dichos síntomas, intentando ir cambiando nuestros hábitos, antes de que cambiemos la hora; llevar una correcta hidratación y alimentación, y mantener las rutinas del sueño.
Todo esto hará que nos sintamos mucho mejor en este comienzo de primavera y que, en lugar de pensar ‘¿por qué me pasa esto a mi?’, seamos conscientes de que es un tema hormonal que, como seres humanos que somos, nos ocurre a todos y que, una vez más, en relación a nuestro grado de adaptación, llevaremos mejor o peor esta época estival.
En mi caso, esta es mi época preferida, la primavera, ya que siento el resplandor de las calles, la alegría de la ciudad, y los días me dan para poder hacer muchas más cosas.
Así que a aquellos que siempre tienen la tendencia a ver el vaso medio vacío, les diría que, por favor, cambien su perspectiva de la vida y aprendan a verlo medio lleno, puesto que la primavera es la antesala de un maravilloso verano que nos traerá, a buen seguro, nuevas sorpresas.
La adaptación al cambio es una cualidad que se debe aprender a trabajar para poder cambiar nuestras vidas de una manera más rápida y simplificar nuestra vida.
De ti depende, como siempre, adaptarte a esta nueva época y poner alegría en tu entorno.
Compra flores en el mercado y decora tu casa y tu oficina con ellas, verás que te ayuda a ver tu entorno con más alegría. Y aprovecha esas horas al día de luz que te regala la vida.
“Para llegar a ser primavera, significa aceptar el riesgo del invierno”(Antoine St.Exupery) y siendo las Estaciones el año se torna “Bio” con cuánto de novedad acarrea. La Pandemia avisa que las arrugas se planchan con algo más que las vacunas que solas,sí nos relegan a “vacunos”.