Unos ladrones se llevaron en la noche de ayer domingo piedras de marés talladas a medida para restaurar la fachada de la iglesia del Carme de Maó, según ha denunciado el constructor de las obras.
Los delincuentes se apropiaron de hasta 25 piezas cortadas para la ocasión y que se encontraban en una zona vallada.
Los hechos ocurrieron sobre las 23.00 horas cuando unos vecinos alertaron de que alguien se estaba llevando en un coche parte del material de construcción.
Los encargados han verificado que falta material y han procedido a denunciarlo ante las autoridades.
“Estamos hablando de un valor relativamente bajo, pero me preocupa que se siguen sucediendo los robos”, explica Rafael Varcálcel, de Construcciones Varcárcel y Méndez.
“Las piedras las pedimos por encargo en una cantera de Ciutadella, por lo que esto nos supone un problema”.
El denunciante confía que las cámaras instaladas en la calle del Carme para la zona de carga y descarga permitan descubrir quién se ha llevado las piedras.
“Todavía nos quedan trabajos por hacer y estamos preocupados porque nos pueden robar más pese a que la zona está vallada”, significa Valcárcel.
Hay que ser desgraciado…. también hay que decir que los materiales podrían haber estado más proteidos.
No hace muchos años en Menorca nadie cerraba las casas con llave. Tampoco se solía cerrar el coche si se dejaba por un rato, incluso con las llaves puestas. Y los periódicos se vendían dejando un montón en la calle con una hucha al lado, y nunca faltó el dinero. Era impensable que alguien robara. ¡Qué diferencia! Debe ser el llamado progreso, pero antes en Menorca se vivía mucho mejor.
Dicen que quién roba a un ladrón tiene cien años de perdón. Después de todas las herencias que se han agenciado de los viejecitos con miedo a la muerte y a ir al infierno y de los 13.000 millones que les da el estado al año, lo que les han robado no es nada.