Cada año, las administraciones locales aportan una pequeña parte de sus presupuestos a un fondo común que se utiliza para ayudar a las personas que más lo necesitan. Se trata de comunidades que solo pueden subsistir gracias a este tipo de ayuda. Con el fin de limar las diferencias y desigualdades que hay a lo largo del globo, el Fons Menorquí de Cooperació escoge líneas de trabajo en las que ya actuan diversas Organizaciones no Gubernamentales (ONG) y las ayuda con parte de estos fondos. La convocatoria de este 2017, como explica Florencio Conde, presidente del Fons Menorquí de Cooperació, ascienden este año a 200.000 euros. Las propuestas deben hacerse llegar físicamente o por correo electrónico a las oficinas de la entidad entre el 1 y 30 de junio. De manera paralela el Fons tiene un margen de actuación para otros menesteres; programas de sensibilización, situaciones de emergencia y más. La convocatoria permite a muchos cooperantes a llevar su ayuda a comunidades a las que, en lugar de darles los fondos, se les ayuda a planificar su futuro o a invertir en las herramientas que les permitan “navegar” por sí solos a partir de esa ayuda. Así es como se ha actuado hasta el momento en ámbitos de ayuda en el desarrollo de comunidades rurales en Centro América o en proyectos de atención al refugiado.