¿Decisión real o campaña de marketing? Esa es la duda que surge al ver el rumbo que ha tomado YouTube en su política de comentarios. La red social de videos, con el fin de generar interacciones respetuosas enviará un recordatorio a los usuarios que quieran publicar un comentario que puede ser interpretado como ofensivo. De esta manera, cuando los usuarios quieran publicar un insulto por ejemplo verán como aparece una ventana con un mensaje para que, tal como ha explicado la plataforma propiedad de Google, los usuarios reflexionen sobre aquellos contenidos que publican. Los usuarios podrán pasar por alto este aviso y publicar el contenido que quieran.
De este modo, la plataforma de vídeos elimina dos problemas con un solo movimiento. No censura pero es proactiva con los discursos del odio que afloran en su red social.
Para muchos, YouTube es conocida como la plataforma del odio o la radicalización. No se debe a la cantidad de mensajes en esta línea que se publican en el portal, sino al algoritmo de YouTube. Para que los usuarios sigan conectados a la plataforma YouTube debe generar el llamado engagement. La manera que tiene YouTube de conseguirlo es a través de los vídeos recomendados. Así, los vídeos que se nos ofrecen después de terminar de ver un vídeo son un poco más extremos que los anteriores que hemos visto. Como explica la periodista especializada en nuevas tecnología, Marta Peirano, si empezamos viendo un vídeo de vegetarianismo seguramente el siguiente que nos ofrezcan será un vídeo de veganismo y finalmente, pasadas unas horas, uno de dietas extremas basadas en el ayuno. Lo mismo se puede aplicar a las teorías de la conspiración o los vídeos de extrema derecha.
¿Por qué una red como YouTube nos vende que ha introducido un freno a los comentarios ofensivos cuando todo su algoritmo se basa en la radicalización? ¿Marketing o decisión real? Esta es la cuestión.
.- Este es un artículo de tecnonews.info y AMIC para Menorcaaldia.com.
