Las medidas entran en vigor a partir de su publicación en el Boletín Oficial de las Illes Balears mañana, sábado 16 de enero, y tendrán una vigencia hasta el 30 de enero.
Y la razón es el empeoramiento de los indicadores epidemiológicos en Menorca:
- la incidencia acumulada a 14 días (IA14) ha pasado de 115,6 casos por 100.000 habitantes el 29 de diciembre de 2020 a una cifra por encima de los 260 casos en las fechas inmediatamente anteriores al acuerdo, lo cual supone un incremento en una semana de casi un 120% de casos.
- la evolución a corto plazo crece de manera acusada, puesto que la IA7 prácticamente se ha duplicado y ha pasado de 76 por 100.000 el 29 de diciembre a 141 por 100.000 actualmente.
- la tasa de positividad los últimos 7 días se eleva a un 9,4%, cuando a primeros del periodo de referencia se encontraba a un 3,43%.
Esta situación desfavorable aconseja, de acuerdo con el informe del Comité Autonómico de Gestión de Enfermedades Infecciosas, tomar medidas adicionales para garantizar la minimización de contagios en Menorca y prohibir las celebraciones masivas en forma de fiestas populares, frecuentes en estas fechas, "debido a las concentraciones de personas y al contacto social descontrolado que suponen y que acontecen un riesgo no asumible en una situación de transmisión comunitaria de la COVID 19 como la que se sufre en estos momentos". Teniendo en cuenta la situación de la isla de Menorca, no se ha considerado necesario llegar al nivel de medidas de restricción que se ha configurado para las islas de Mallorca e Ibiza.
